Recuerdo muy bien que dije que ella caería. Lo afirmé, dije que su Imperio caería gracias a mí... pero la verdad es que el crédito no es mío. Por el contrario, es de ella.En los últimos días, un suceso desafortunado logró separar en partes el reinado de Paris, haciendo que algo que la mantenía protegida, se destruyera y decidiera ir por su camino, arruinando todo vínculo.
Fue solo un comienzo. Se que está mal alegrarse (correción, no se como se podría decir porque la verdad no me alegra que este problema haya ocurrido) por algo malo, aunque ni siquiera es relevante porque en unos días el Imperio estará completo como antes, junto con su fiel Corte Inseparable que hace todo el trabajo sucio.
Y demás cosas sucias también, pero no vale la pena hablar de pornografía en este blog.
De todos modos. Ni siquiera vale la pena estar al tanto de lo que le ocurre porque al mínimo problema que tiene todo el mundo se entera y no es que sean cosas importantes.
Dos semanas de tareas por internet y lejos de cines y lugares públicos es suficiente para olvidarme de su existencia y desear que no llege el día de verla en sus cosas cuando regresemos.
Solo se que algún día se le acabará todo el chiste.
Y ahí será cuando de verdad todo esto me haga gracia.
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