No solo hiciste que mi ánimo comenzara a estar por los suelos y que el clima se haya puesto igual que mi estado de humor (está lloviendo copiosamente sobre la ciudad) si no que malograste hasta lo que los Lunes me hace sentir tan bien.Tuve una agradable clase con el profesor E hasta que me dijo de forma muy gentil que lo que me faltaba era poner más en práctica lo que aprendía en mi casa, para así tocar perfectamente los Lunes. A pesar de todo, para ser 6 meses de clase, no estoy mal.
De todos modos no me gusta tocar esa clase de temas, mucho menos con alguien como el profesor E que es un hombre bueno de verdad. Ni siquiera él pudo animarme esta vez y eso me molesta demasiado.
Pero sabes... me he dado cuenta que quizás ya no debo de ser tan amigable contigo.
Efectivamente, así como lo pensaba en una entrada de hace poco, ahora si voy a transformarme en Lord Voldemort y seré más perversa que ese calvo sin nariz.
¿Por qué? Porque las cosas son así, efectivamente. El hecho de haber tomado esa decisión es plena, completa y definitivamente tu culpa.
Ya no habrán momentos rosas, no habrán nubes de colores, no habrá magia ni cosas especiales ni nada por el estilo.
No habrán canciones dedicadas a ti, ni palabras gentiles.
Ya no hay pastel para ti.
Y es tu culpa.
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