martes, 31 de enero de 2012

Kuchisake-onna

Fuente: Wikipedia.


"Kuchisake-onna (La mujer con la boca cortada) es una leyenda de la mitología japonesa. Trata sobre una mujer que fue asesinada y mutilada por su esposo y se convirtió en un yokai (espíritu demoníaco), regresando para vengarse preguntándole a sus víctimas si es hermosa, las cuales al responder son posteriormente asesinadas por ella. 
La leyenda dice que hace mucho tiempo hubo una bella pero vanidosa mujer que se casó con un samurái. La mujer, al ser vanidosa, engañaba a su esposo. El samurai sabía que estaba siendo engañado, así que, celoso y furioso, llegó al lugar donde estaba su esposa y le cortó la boca de un lado a otro mientras gritaba: "¡¿Piensas que eres hermosa?!". Cuando terminó, exclamó: "Pues, ¿quién va a pensar que eres hermosa ahora?" Aquí es cuando la leyenda toma su inicio. Se dice que hay una mujer con una mascarilla, -lo que no parecería extraño en Japón, ya que la mayoría de habitantes las usan para prevenir enfermedades- que camina por las noches, especialmente las noches oscuras y tenebrosas. 
Si se encuentra con algún joven, -normalmente estudiantes de secundaria o universitarios- le pregunta: "¿Soy hermosa?" ("¿Watashi kirei?"). Si el joven le responde que sí, ella se quitará la máscara y le preguntará: "¿Y ahora?" ("¿Kore demo?"). Lo más probable es que la víctima grite o diga que no. Entonces la mujer le cortará la boca de un lado a otro con unas tijeras. Sí la víctima responde de nuevo que sí, la mujer lo seguirá hasta la puerta de su casa y ahí mismo lo asesinará, ya que "kirei" en japonés (hermosa o linda) es muy parecido a decir "kiri" (cortar). En otras versiones de la leyenda, los efectos de responder sí cambian, aunque la mayoría coincide en que es imposible escapar de ella tanto con esa respuesta como la anterior.
 La más común reza que si se le dice sí, la Kuchisake-onna se abalanzará sobre el aludido para cortarle la boca para que sienta lo mismo que ella. Sin embargo, hay métodos para evitar el fatal desenlace. Según las fuentes, llevar dulces y ofrecérselos puede apaciguarla; en otra versión se dice que si el aludido le contesta con la misma pregunta ("¿Soy hermos@?"), la Kuchisake-onna quedará confundida y ello le dará tiempo para escapar; y por último, si cuando ella pregunta se le dice que uno tiene prisa y debe atender un asunto muy importante,si no le contestas, la mujer se disculpará y le dejará marchar debido a los modales japoneses, marchándose ella también"

1 comentario:

Anónimo dijo...

ya tengo un buen pretexto para evitar responder ese tipo de preguntas... evitar ser asesinado... gracias...