¿Te detienes?

( Una conversación que tuve con Diego. El quiso que le escribiera una entrada. Desde aquí le agradezco por todo lo que ha hecho se que cuando lea esto se pondrá felíz. Me haces reír mucho, siempre te lo agradeceré )

-Y en fin... eso es lo que pasó. Y sí, me dolió bastante pero oye... ya lo supere.
-Vaya imbécil.
-¿Uhm?
-Él. Osea es un imbécil no puedo creer que haya hecho algo así.
-No tiene la culpa todo soy yo que lo exagero. Y solo yo le puedo decir imbécil.
-Buenooo esta bieeen. Pero de todos modos no se como lo hace, digo si yo estuviera en su lugar ya habría estado contigo desde hace ¡UF!
-Pero tu eres tu y el es el. Además sabes que te quiero así como estamos, eres de demasiada ayuda.
-Aw, sabía que te gustaba. Sabes que lo nuestro es eterno...
-No, no lo es. Y es porque no existe ¿Te acuerdas?
-¡Oh ya vamos no lo sigas negando...!
-¡Oye!
-¡Ya se que me amas! ¡Detente por favor...!
-No me hagas golpearte. Te lo advierto, una mas y hago que pierdas el conocimiento.
-Ok, ok. Ya entendí.
-Genial.
-Entonces ¿Me prometes que no vas a llorar más?
-Lo recontra prometo. Tienes razón, ya no debo de sentirme mal por tonterías.
-¡Así me gusta! Perfecto.
-Gracias Diego.
-De nada. Sabes que estoy aquí.
-Creo que a pesar de todo no eres tan insoportable.
-Sí... yo también te aprecio bastante. ¡Jajaja!
-Es verdad, no eres del todo insoportable.