jueves, 31 de marzo de 2011

Punto Final

"No lo volvimos a ver después del entierro. Ya nadie quiere volver a hablarle, lo miramos de lejos, ya no tenemos ánimos para llamarlo, preguntar cómo se encuentra y qué va hacer ahora que ella se ha ido para siempre. Amelia, ese nombre que significó una historia de largos años que por fin había encontrado un final. ¿Significó? Significa. Ahora más que nunca, porque cuando algo que amabas se te muere, es imposible olvidarlo. Pero él no la amaba ¿O si? Me pregunto si alguna vez nos enteramos la verdad, solo éramos testigos de esa triste historia. Nos reuníamos a hablar de lo sucedido, escondidos e intentando que Amelia no nos escuchara. ¿Qué le pasó? ¿Qué falló y porqué somos tan pésimos amigos, hablando del pasado triste de ella? Ahora más que nunca, nos hacemos esa desagradable pregunta. Jamás olvidamos ese otoño fatal cuando tuvimos que ser más fieles a Amelia que nunca, tuvimos que cuidarla, mimarla y sonreír cuando nos decía que todo estaba bien. ¿Qué va a hacer ahora él, con Amelia muerta, durmiendo para siempre bajo tierra? Vaya, debe de ser fatal saber que si esto sucedió, fue por su culpa. Es duro, lo sé, lo sabemos todos, pero es la verdad y tal como Amelia decía, las verdades duelen. De todos modos lo decimos entre susurros, porque decirle que murió por él la haría quedar como una cobarde, otra heroína fallada y absurda de los cuentos que detestaba leer. No murió por él, la mató un cáncer silencioso. Pero la tristeza atrajo todas las las calamidades a su vida, de eso no cabe la menor duda. Pasaron muchos años de bienestar, todo parecía ir muy bien hasta que ella nos llamó: "No puedo más" nos dijo. Poco después nos avisaron de lo peor por teléfono. Lo veíamos a él mirando el ataúd con los ojos vacíos, no estaba llorando, no tuvo la fuerza de observarla con los ojos cerrados dentro de esa caja negra, definitivamente no fue lo suficientemente hombre para ver a la mujer que amó vuelta un cadáver níveo, perfecto, hermoso. Lo observamos sin saber si sentir compasión, cólera o indiferencia. Lo lamentamos, Amelia, porque no te protegimos lo suficiente. No te enseñamos nada y la vida misma te metió a su escuela fatal, dura, cruel, con profesores de puñales ocultos. ¿Qué vamos a hacer todos sin ti? ¿Cómo va a vivir él? ¿Nosotros? ¿Cómo vas a estar tú, tan sola allá arriba como un ángel silencioso? Cuídanos, Amelia y cuídalo a él. Olvida todo lo que te hizo. De todos modos, fue el único hombre al que amaste en tu corta vida"

Spray To Forget

Las semanas en el colegio van pasando con un tiempo muy extraño. A veces creo que van muy rápido, otras veces pienso que van demasiado lento. Desde que me levanto todos los días como a las cinco y algo más, ando de mejor humor en el colegio, salvo cuando me da uno que otro ataque ridículo que estoy segura, con el tiempo, van a ir desapareciendo. Les mentiría si les digo que todo va absolutamente bien. Es más, puedo decir que con los días mi equilibrio emocional y mental va oscilando entre los dos extremos de la psiquis humana. Por un lado esta la increíble sensación de estudiar, aprender, reír mucho en el colegio y disfrutar sin límites de mi último año y en el otro lado está esa sensación espantosa cuando me voy a dormir y debajo de las sábanas, pienso si estará bien decirle a Dios por enésima vez en este año que por favor me golpee mientras duermo y me haga olvidar mis absurdos líos adolescentes.

Quizás yo me busqué mis propios problemas. Tienen razón, de todos modos, Samantha dijo que todos teníamos el derecho de cometer nuestros propios errores y hasta ahora, eso es lo que he hecho desde que tengo memoria.

No es tiempo de darle vueltas al asunto. Me reuní con Kiomi después de mucho tiempo para charlar en el Starbucks sobre la vida y demás, fue una conversación inspiradora de muchas horas y por fin pude probar esas galletas azucaradas y los famosos Frapuccinos (¿así se escribe?). A unos metros de nosotras, en una mesa al frente de la ventana, tres mujeres charlaban. Era la abuela, la madre y la nieta. No pude evitar escuchar de vez en cuando lo que decían, al parecer la más joven tenía un problema muy fatal y estuvo aguantándose las ganas de quebrarse todo el tiempo, hasta que vi que se echaba a llorar silenciosamente sin un límite fijo.

"Llora, hija mía, llora" dijo la abuela abrazándola "Las heridas solamente sanan cuando uno llora".

Si ese es el caso, eso explica porqué tengo tantos problemas en caminar sin darme tropezones de vez en cuando en pensamientos tristes. Hijos míos, hace mucho, puedo decir que hace ya un mes y algo más, que me estoy aguantándo esas ganas de romperme en pedacitos chiquitos y esperar a que alguien me recoja.

Me limito a levantar la cabeza, sonreír, echarme el cabello hacia atrás y caminar como si nada nunca, jamás, hubiera pasado. Qué estrategias las mías ¿No?

Voy a dar el discurso de graduación en el ICPNA, la entrevista y todo lo demás fuera una experiencia única. Ya colgaré fotos y todo lo demás, incluso van a ir personas de la Embajada Americana.

Por otro lado, las pesadillas desaparecen con una velocidad desagradable, pero por lo menos sé que algún día dejaré de soñar tan mal. Argh, todos estos son efectos secundarios de preocuparme (según la mayoría de mis cultas amistades) en huevadas.






Abrazos Bohemios,

Req.

Rosa Musical



Ojala fuera una flor ingrata

¡Tan llena de espinas!
ojala permaneciera oculta en la hiedra
ojala fuera tan difícil de maltratar

Si tan solo pudiera flotar como nebulosa,
en los vacíos tiernos
de ese fruto solitario que es mi alma,
tan desolada, confundida
si tan solo fuera tan invisible como él quisiera,
si fuera un cadáver, si fuera una niebla

Ojala fuera vil, malvada como las olas rebeldes
¡Tan llena de rabia, tan ciega!
ojala me derramara en violencias y palabras
ojala fuera tan fácil caminar desde un inicio pueril

Si tan solo fuera un sueño, para desaparecer en un espacio enmudecido
poder ser tan breve, no dejar marcas
si tan solo fuera tan inolvidable, "ese adjetivo vendido"
si fuera suficiente, más valiente
podría caminar con los ojos sumergidos en el éter

Ojala fuera como mis días pasados, como todo lo viejo
¡Tan risueña! ¡Tan despierta!
si tan solo danzara en los botones muertos de esta triste primavera
si tan solo diera a luz los fantasma, estas penas
ojala yo llorase,
sin miedo a la condena

sábado, 26 de marzo de 2011

Escupitajo #13:

Después de algo de tiempo me he dado cuenta que ya no hago muchas cosas que sí podía hacer antes. Esta es solamente una nota, necesito escribirlo en algún sitio y qué mejor lugar que acá, donde tengo mi vida partida en entradas, meses, años y etiquetas.
  • Ya no escucho Piazolla ni a Gardel ni ninguna clase de tango.
  • Ya no escucho Regina Spektor.
  • Ya no escucho Carrie Underwood (aunque solo conocía una canción).
  • Ya no escucho Camila.
  • Ya no escucho boleros del siglo pasado.
  • Ya no puedo estar despierta hasta la madrugada.
  • Ya no puedo dejar de levantarme a las cinco.
  • Ya no puedo cerrar los ojos demasiado tiempo.
  • Ya no puedo mirar por las ventanas ni por el balcón por más de 5 segundos.
  • Ya no puedo pasar horas escribiendo como debería.
  • Ya no puedo dejar de hacer poemas a donde vaya.
  • Ya no puedo dejar de leer por un solo día.
  • Ya no puedo considerar la matemática algo minúsculamente importante.
  • Ya no puedo entristecerme por ir al colegio.
  • Ya no puedo ignorar detalles de mi pasado pasadísimo (hace unos dos años)
  • Ya no puedo dejar de profundizar en cada cosa que veo.
  • Ya no puedo ver películas románticas ni dramas en la televisión.
  • Ya no puedo dejar de soñar todas las noches.
  • Ya no puedo dejar de hablar con Dios.
  • Ya no puedo deprimirme como antes (cosa muy buena).
  • Ya no puedo ignorar que extraño a Sarah.
  • Ya no puedo callarme mis opiniones.
  • Ya no puedo dejar de pensar en el futuro.
  • Ya no puedo responder a los dramas emociones de mis amistades con suavidad.
  • Ya no puedo desanimarme tan rápido como antes.
  • Ya no puedo controlar las emociones extremas.
  • Ya no puedo pasar un solo día sin pensar.
  • Ya no puedo evitar los escalofríos a cualquier hora del día.
  • Ya no puedo dejar de estar de buen humor cuando estoy acompañada.
  • Ya no puedo ocultar mi frialdad.
  • Ya no puedo ignorarme.
Fin.

Black Strings


Fue mi error, guardar lágrimas
en el pecho, entre las manos
solo fui una fotografía
fui un sueño convertido en pesadilla

He sido vidrio ensangrentado,
fui un transtorno diurno
una narración inolvidable
letal

Fue mi error, ser la rosa venenosa
el rostro de fantasma,
fue mi error amar sin barreras
he sido una realidad convertida en quimera

Me consumieron los sueños, me ahogué
vivo en la agonía de haber tocado estrellas
de haber visitado las cavernas de la felicidad
de haber perdido todo en una noche

¿Mereceré, pues, la muerte?
Quizás el odio eterno, impalpable
mereceré ser un recuerdo, una página arrugada
no soy más que una nota sin pentagrama
un libro sin escritor
un Febrero sin romance
en mi alma solo soy terror

miércoles, 23 de marzo de 2011

Vaginas Mágicas II

ADVERTENCIA: Contenido algo explícito y que quizás rodee los bordes de lo vulgar


II. Vida Real
Mis contactos sociales se dividen y separan en ramas que mayormente suelen contrastarse. Mi grupo de amigos alcohólicos, liberales, conservadores, centrados, descarriados, artísticos, matemáticos y otros más.
Entre todas esas personas, ya hay algunos que han tenido que pasar por el conocido paraíso abstracto de la sexualidad, tanto chicos como chicas. No planeo tocar este tema para ensuciar el nombre de los varones y hacerme pasar por una feminista extremista.
Prometí dar unas cuantas palabritas sobre la vida real, pues voy a cumplir la promesita. En el caso de mi pequeña comunidad escolar, ese curioso botón de las hormonas se perdió cerca del año 2006, cuando llegó nuestro ingreso a la secundaria y el inicio de las fiestas que poco a poco fueron evolucionando. La llegada del famoso, desgradable y nauseabundo reggaeton logró que las cosas tomaran otro nivel, y fue así que la muestra de carne y los cuerpos delgados se volvieron un requisito para que te saquen a bailar. Seamos sinceros, todos saben a qué me refiero, las mujeres delgadas la han tenido muy fácil en este siglo, muy, muy fácil.
Los años pasaron, las fiestas cambiaron, mis amigos crecieron y pues, las hormonas se alborotan cada vez más, en especial en momentos como éstos donde las pastillas, los condones y los hoteles de diez soles están muy de moda y los medios nos bombardean con libertinaje.
"Amiga 1" perdió la virginidad con un tipo con quien no mantenía una relación sentimental, así de crudas fueron las cosas, solamente fueron a su casa cuando no había nadie y fin de la historia. De ahí vinieron otros tipos más y así sus parejas fueron cambiando hasta que se retiró del tema y ya todo está tranquilo, pero su reputación quedo sepultada debajo de cinco kilómetros de cemento, tierra y chismes espantosos. ¿Quieren que les diga algo muy cruel respecto? Un día alguien le gritó "GONORREA" pero al parecer no se dio cuenta. Lo peor de todo, es que los hombres que se enteraron gozaron increíblemente de destruir su imagen de a poquitos.
"Amiga 2" perdió la virginidad (admito que decir 'perder la virgnidad' suena pagano y espantoso, pero así es la verdad) con un chico con quien andaba en cosas, pero tampoco era su pareja. Quizás esto fue un poco más crítico porque no estaban en una casa ni en una cama. Pero en fin, esos son detalles de morbosidad que no tengo porqué nombrar. No fue tanto shock porque ambos se lo buscaron, ahora viven una vida común y corriente, no se acuerdan de esa noche ni hablan de ella. El mar está tranquilo cuando nadie lo toca.
"Amigo 3" (ésta vez es varón) perdió la virgnidad en un momento X de su vida, porque jamás me ha contado al respecto, pero ahora vive muy satisfecho, pasando por situaciones fogosas en lugares extraños y en situaciones equivocadas. Debo de admitir que ganaría mucho dinero si escribiera un diario erótico, es una pena que no sea el caso. A comparación de mis amigas que se mantienen en el anonimato, él si tiene un nexo muy importante con esta chica, pero a mis ojos, no el indicado, pues he llegado a concluir que todo su drama surgió por la simple necesidad de acostarse con alguien. Fue después de un buen tiempo que llegó el amor. Primero orgasmos y luego romances, vayan haciéndose una idea. Resultado: Mi Amigo 3 está enchuchado.
"Amiga 4". En éste caso, digamos que la cosa se acerca un poco más a lo irreal, porque al parecer fue con mucho amor, por lo menos de su parte, pero se duda masivamente que haya sido correspondido. El resultado es el mismo que en el caso del Amigo 3, porque se ha vuelto parte de esa triste masa de hombres mandoneados, lo que coloquialmente se llama "pisado" y suele ser un espectáculo lamentable. Puedo jurar que es capaz de arrancarse las venas de una mordida si su amor colorinche lo abandona o lo deja de querer.
Cuatro situaciones de la vida real. Créanme que ninguno de ellos puede vivir en paz por completo, aunque siempre parezcan estar de buen humor.
Una gran mayoría de mis amigos algo descarriados, vive dependiente del sexo desde que lo probó.
Resultado: Reputación destruida, padres engañados y una gran dependencia en algo que por el momento, no vale la pena.



Vaginas Mágicas I

ADVERTENCIA: Contenido algo explícito y que quizás rodee los bordes de lo vulgar



I. Términos & Conceptos / Inicio
Hay muchos hombres en este mundo. Hay hombres que caminan en la calle sin preocupaciones, hombres que silban desde las ventanas, hombres que manejan motocicletas, camiones, hombres que miran televisión, que bailan ballet y que hacen retratos en los parques a niñas pequeñas. Entre esa enorme masa de hombres, existen los hombres que conocemos tu y yo. No importa quien seas, tenemos eso en común. Y si seguimos dividiendo, en esa masa de hombres que conozco se encuentran amigos míos que han sufrido una transformación que pocos varones logran experimentar en esta corta y rara vida.
Vayamos directo al grano: tengo amigos que viven enchuchados.
¿Pero qué es estar enchuchado? Según un libro que un colega me prestó hace mucho tiempo, en la jerga peruana, significa cuando te coges de una mujer y no la quieres soltar porque te conquistó con sus dones naturales que Dios les dio ¿Exactamente? Ah si, la vagina mágica. Suena muy bien todo eso que Dios a las mujeres nos dio senos, óvulos, ovarios, curvas, una serie de elementos altamente seductores para el género opuesto. La verdad es que lo comprendo, es normal que un hombre se altere porque ve de repente a una calata en un periódico, pero la cosa mayormente queda ahí.
El problema es cuando la felicidad, equilibrio mental y la capacidad de hacer cualquier cosa, se vuelve dependiente de una juvenil vagina. Digamos las cosas somo son; tengo amigos que viven pensando en el momento de tener contacto con el órgano sexual de sus parejas. ¿Extraño? Probablemente me digan que eso ha pasado siempre, incluso nuestros padres tuvieron esos momentos, es completamente "normal". El problema con todo esto, es que mis amigos no llegan ni a los 20, lo cual me hace pensar en a qué clase de límite demente ha llegado la sociedad con su estupidez de ponte un condón en el pene y sé feliz.
Háganme el favor, la gente dejará de tener enfermedades venéreas cuando deje de revolcarse libremente con cualquier extraño y no por utilizar plásticos incómodos. Uf...
Como se habrán dado cuenta, soy una persona que está en contra del sexo antes del matrimonio. Comprendo, de alguna manera, el hecho que el cuerpo humano en mágico en ese sentido, de vez en cuando siempre hay momentos donde a uno se le sube la temperatura y bueno, la imaginación vuela. Justamente es eso: Por algo tenemos la imaginación.
¿La edad perfecta para el sexo? Hijos, no me lo pregunten a mi porque solo tengo 16, soy virgen, mas no retrógada ni beata y no suelo tocar temas como estos tan abiertamente. La gente que ya está experta en el tema supongo que podrá responder, decir lo bueno y lo malo, los riesgos y las ventajas de tener relaciones a determinada edad. Lo único que yo sé, desde mi pequeña silla, es que la adolescencia no es un buen momento para el sexo y jamás lo será, aunque dentro de unos años puedo apostar a que esa idea habrá sido tachada por completo. Puedo apostar que en unos años los niños de doce sabrán más que yo a esta edad. Paf, que fiasco de futuro nos espera en el ámbito sexual.
¿Por qué es una mala edad? No voy a venir con un curso de teoría espantosa que solo las psicólogas saben dar, porque eso me lo han dado hasta a mi y créanme que no funciona.
Yo les voy a contar un poco de las cosas que pasan en la vida real. Dejemos atrás los libros de reproducción, las novelas juveniles de chicas débiles que toman decisiones estúpidas.
Yo les voy a contar la realidad, hasta donde me ha tocado vivirla.

Cosillas Mías

Llevo unos cuantos días teniendo sueños altamente peligrosos. Hace poco soñé con junglas, luego payasos, luego bailes y llegué a soñar con ancianas que no pueden soltarme el brazo y lloran desesperadas. Primero pensé que podía haber sido una versión subida de peso y extraña de mi abuela materna (la cual murió cuando yo tenía 2, por lo tanto solo la recuerdo en su versión de anciana por una fotografía), pero terminé considerando el hecho que sea una triste visión de mi lado que se siente viejo.
A muchas personas, tanto por el mundo cibernético como por el real, se les hace difícil considerar que solamente tengo 16 años y sigo estudiando en un colegio cristiano muy bonito y lleno de personajes extravagantes.
Y pues, hay muchas explicaciones a estos sueños fatales, cuyo significado exacto ignoro, pero hasta donde sé, solamente predicen desgracias, traiciones y malas noticias. Ojala que el Internet esté equivocado (como suele pasar) y todo sea producto de mi imaginación, espíritu rebelde. ¿Mi opinión? He llegado a sospechar que me están haciendo brujerías, no solamente a mi, si no también a mi familia, en especial a mi mamá. Curiosamente, siempre nos duele la misma parte del cuerpo en el mismo día, tenemos sensaciones corporales muy parecidas, pesadillas en las mismas noches, entre otras cosas. Opción número uno: Es por ese lazo sanguíneo y espiritual que tenemos las hijas con las madres. Opción número dos: Me están haciendo una macumba brutal en algún lado de ésta ciudad.
Lo superaré, superaré el dolor leve en el ojo izquierdo, mi obsesión con los tribunales y las series de abogados y mi sentimiento ilimitado de maternidad que me obliga a abrazar a todos esos niños pequeños que van corriendo hacia mi en el colegio. Ya les contaré de "mis protegidos", esas almas puras encerradas en esos cuerpos diminutos que a penas me llegan a cintura (tomen en cuenta que soy una enana, por Dios...).
El colegio decidió comprarnos carpetas nuevas después de siglos de existencia, eso merece un brindis imaginario porque no puedo tomar durante la semana. Se acercan dos fiestas, ya les contaré cómo fue, qué hice, qué sentí y los sueños locos que tendré en los momentos de camino al Nirvana.
Pórtense bien.



Abrazos Bohemios,
Req.

domingo, 20 de marzo de 2011

Pesadilla I

Estaba sentada con el violín en la mano, parecía un aparente concierto en una fiesta, estábamos muchos los del conjunto del Señor del Mal, estaba todo algo oscuro, yo vestía de luto.
A mi lado pude reconocer a una anciana que se me hizo muy familiar, a Laurence y ni rastro de mis padres.
Fue entonces que mi violín desapareció y aparecí bailando tango por segunda vez en mi mundo de los sueños con una facilidad que quizás jamás alcance en vida real. Era un hombre el que me guiaba, sentía que lo conocía, estaba de negro como yo, no tenía rostro, no podía verlo bien, estaba tibio, me manejaba con facilidad.
Se acabó el baile, mi violín no volvió a aparecer y mientras unos payasos verdes y vistosos hacían un show en la pista, sentí que era jalada por uno de ellos y yo danzaba con los payasos, feliz, me reía, me reía mucho.
Cuando la fiesta terminó Laurence vino con su camisa a rayas mientras yo cerraba un estuche vacío. "Gracias a todos" y algo más, escuché decía. Me abrazó, cogió su estuche y se fue por una calle oscura, tan negra y que me parecía tan hostil que no me atreví a seguirle, aunque sabía que por ahí estaba mi próximo destino.
Los payasos salieron ya sin maquillaje. Pronto me vinieron a recoger mis papás en el auto. Nos hundimos en la oscuridad.
Desperté con las uñas negras,
como si hubiera escarbado en la tierra.
Maldije mis sueños
y me reí por lo irónico de mi situación.
Me reí mucho.

sábado, 19 de marzo de 2011

Vivo Un Sábado

Escucho música experimental, cierro los ojos y siento que estoy flotando sin necesidad de alucinógenos. Ha sido un día agotador, aunque no haya desaparecido de casa por la noche como la semana pasada ni haya terminado hablando de Hitler con la lengua trabada por líquidos exóticos. Me duelen las extremidades porque he subido el nivel, ahora no solo corro por las mañanas cuando todo está azul, ahora me entreno brutalmente porque sé que me hace sentir bien. Quién diría que esta vieja tortuga con miopía terminaría haciendo ejercicio, levantándose a horas donde lo correcto es dormir tibio entre las sábanas y escuchando música mientras se le agarrotan los viejos músculos. El dolor desaparecerá con los días, no hay nada como sentir que se te rompe el vientre después de unos buenos abdominales; sé lo que estoy haciendo, no me voy a morir, ya era hora que comenzara a hacer algo por mi salud y por mi bienestar psicológico.
Anoche tuve una decaída muy mala, lo admito, he estado revisando los dos poemas (si mal no recuerdo) de ayer y sí, estuve crítica, difícilmente puedo tragarme las cosas por siempre, jamás dejaré de ser esa persona que tiene días tenebrosamente lúgubres. Como ya les dije, la depresión ha desaparecido y ahora solo sufro compases cortos de pena, nada que me mate, nada que me haga retroceder.
Poco a poco estoy intentando cerrar heridas viejas y dudas pasadas. Ojalá pudiera ver las cosas tan claras como en las fotografías que tomé hoy día por la reunión que tuve con Ana por su cumpleaños. Es bueno que hayamos tenido un final feliz, no solo en la película animada que vimos en mi sala, si no en nuestro día en general. Los años pasan muy rápido, las personas cambiamos y nos volvemos mejores, peores o aburridamente iguales. Recién siento ese adormecimiento de haber estado estornudando todo el día.
Heme aquí, pues. Escribiendo un sábado por la noche en mi blog, dejando en pausa esa película tan común y cliché de los adolescentes marihuaneros y excitados que viajan lejos de la ciudad para ser libres en su estupidez y terminan en la casa de un psicópata brutal que los cuelga en ganchos. Felizmente no he llegado ni a la primera escena sangrienta, a penas alguien se disparó en la cabeza y ya me pareció aburrido, quizás es la tirria que me causan las películas violentas.
Vivo en un mundo lleno de cosas más reales, prefiero leer la vida de Leatherface en Wikipedia y no estar viendo éstas películas gringas de mal gusto que disfruta la gente enferma adicta a las torturas.
No esperen que apoye la violencia, el gore y la degeneración cibernética, me parece desagradable y siempre lo hará.
Esta noche también una amiga descubrió algo triste de su relación, pero curiosamente la pena no la invade. Es más, planea terminar todo porque, como yo dije antes, "las hormonas no tienen sentimientos". Lo que más me hace pensar de esa situación, es que por lo menos hay una buena razón para tirarlo todo por la ventana hacia el camión de basura más cercano.
Ignoren esos escupitajos, chispazos melancólicos que tengo de vez en cuando, ya saben mi historia, ya saben que me demoro en tragar lo intragable. Blabla, estoy divagando.
Voy a dormir porque mañana tengo una tarea de matemática que hacer, un sombrero de cocina que comprar para hacer muffins el lunes por la mañana y un largo camino en el mundo de los sueños.
Hoy mi sobrino de 12 años tuvo su primer quincianero y yo solo pude quedarme sin aire mientras lo veía partir como todo un hombrecito. Me sentí vieja, cansada, llena de experiencias carentes a ojos de mis padres.
Buenas noches a todos.
Abrazos Bohemios,
Req.

viernes, 18 de marzo de 2011

La Cuarta Muerte

Voy a pintarme un agujero en la piel
ahí, en el lado izquierdo del pecho
donde siento un silencio de muchos años
será el hueco de mi organismo,
será la guarida de mi pena


Haré una hoguera de cuentos y poemas,
una torre de mis héroes, de mi sangre
y será el incendio de mi vida,
será mi transformación en las cenizas que soy

Voy a hurgar en la herida de mis entrañas,
quinientas muertes no bastan ésta noche
para satisfacer mi hambre de desgracia
será la miseria encarnada mujer
será le época oscura de mi vida sin luz

Confiaré en los terrores nocturnos,
lloraré mis pesadillas, tan premonitorias
será que la fantasía jamás se equivoca
será que me han devorado mis sueños

Voy a dormir en el ataúd que me llama,
voy a abrazar la tierra que me acaricia
recibo el beso apasionado de la Parca tan fría
será que me arrastran al punto de origen
será que me ha llegado la hora

Escupitajo #12:

Nadie tuvo el derecho de hacerme ésto.
Sé que me merezco muchos castigos por las maldades de mi vida.
Pero nadie tuvo porqué voltearme la vida, sacarle las monedas y devolverme cadáver.
Sé que todo pasa por algo y estoy reaccionando de la manera equivocada.
Pero nadie tuvo el derecho de plasmarme en hojas y luego quemarlas por la mañana.
Es la primera vez que me quejo directamente de mis inconvenientes del verano.
Lamento no poder decir que es la primera y última vez que lo hago.
Soy una ruina que intenta ponerse de pie, pero tengo las piernas rotas, tengo la garganta atestada de de punzadas cada cierto tiempo.
Estoy perdida, no es mi culpa.
Dios mío, te juro que yo jamás busqué todo esto.
Lamento ser tan tonta, lo siento muchísimo.

Bordes Lipemaníacos

Hoy día logré herirme solo para saber si aún puedo sentir algo. Observaba por la ventana hasta que decidí salir del salón, me rodé por las escaleras de un resbalón, pero no sentí dolor. Fui entonces hasta la terraza y salté cuatro metros abajo hacia el huerto del colegio, quizás me rompí las piernas o me clavé una flor en el brazo, pero no sentí dolor alguno.
Fui a la sala de arte a echarme pintura encima, acrílicos entraron por mis ojos sin vida, pero no sentí ardor alguno. Sabía amargo, absurdo, pero no habían molestias.
Abajo los niños se burlaron de mi apariencia, pero no me molesté.
Hoy día corrí por la calle con mi uniforme arrugado, mis pulmones reventaban, pero no había dolor, mi garganta se cerraba, mi corazón se salía por la tráquea, pero no había dolor. Esperé sentada en el borde de la vereda, pasó un chico con lentes negros en una bicicleta y me gritó malas palabras después de arrollarme con ella. Tenía huellas de llantas en la blusa, pero no sentí dolor alguno.
Caminé hacia la puerta de mi casa, un grupo de colegiales pasaron cerca mío, cuatro amigas y una pareja en toqueteos, esperé a las ironías de la vida, pero no hubo dolor. Entré y dejé que mi mamá me gritara por estar mugrienta, pero no lo hice y no me dolió la frutración de mis planes.
Guardé entonces mi violín con un candado y arrojé la llave por la ventana.
Hice una pila con mis libros favoritos y los quemé junto con la última botella de alcohol que me quedaba.
Cogí mis cuadernos de poemas y arrugándolos con las manos, los arrojé a la basura.
Rompí mis discos de música clásica en dos.
Mastiqué amargamente las velas de mis cumpleaños pasados hasta que se quebraron mis dientes.
Rompí vidrios y caminé descalza por encima como si no los pudiera ver.
Arranqué las teclas de mi piano hasta que no quedó ni una sola entera.
Apagué la vela de esa abuela a la cual jamás le hablé.
Hoy día me logré herirme solo para saber si aún puedo sentir algo. Destruí mi mundo en cuestión de horas y no sentía nada, soy un vacío que camina, soy una silueta sin rostro, sin cuerpo, no tengo nada, he perdido la habilidad de la actuación.
Me miré en el espejo al final del día y entonces fue que me atacó el miedo, la agonía llegaba después de tanta búsqueda.
Rompiendo todo en cristales diminutos, me eché a llorar.
Solamente en mi vida, lo más hermoso se transforma en una pesadilla.

Fría



Me encuentro en el pedazo de vidrio,
el espejo roto de mi noche de ultratumba
maldigo esa mirada sin vida, la iris que ha perdido el brillo
no soy nada más que una silueta
soy una sombra

Sin sesos descanso como cadáver sin mortaja,
me encuentro en lo místico de mi agonía
la tirria y la ironía,
mi espíritu es consumido por esos tristes gusanos
los de mordidas pequeñas
los monstruos verdes de mi sueño

Se niegan lágrimas de mis ojos cansados,
¿Podría odiarme entonces de por vida?
guardar éste fantasma que soy
en la caja vacía de mi alma
quemar este corazón que no palpita
callar las únicas voces que escucho,
que recogen los pedazos de mi ruina

Estoy perdiéndome
jamás sentí el sabor vacío,
azulino
de este miedo incomparable
el demonio que alimento en mi entraña




miércoles, 16 de marzo de 2011

Euforias & Cuadernos

Heme aquí. No tuve la energía o las ganas suficientes de entrar después de mi noche de locura para contarles las cosas que viví y sentí. Resumiré, pues, aquellas horas de felicidad absoluta lo más que pueda, no debería de estar aquí, cada día entro menos a la computadora y es por mi propio bien. La fiesta fue una noche de alucionaciones, nubes y líquidos exóticos por todos lados, los vecinos de la cumpleañera hicieron algo de problema, pero nada que no se pueda resolver con una promesa de limpiar todo después. Supongo que todos pasamos un buen momento, lo más importante es que mi querida amiga haya pasado una buena noche. Probé mi primer cigarro y a aquellos que no han fumado aún les digo que no se pierden de nada extraordinario, no sé si lo digo porque no me fascinó tanto o porque no lo hice bien. Frederic me dice que "necesitaba golpear", es decir, tragarme el humo hasta las entrañas, pero no me suena tan agradable. No pasará mucho hasta que tenga otra reunión para sentirme Lennon y hablar de Hitler con mis amigos mientras estamos consumiendo aguas del paraíso.
¿Hablas de Historia y del futuro cuando estás pasada de copas con tus amigos?
Soy rara. Lo sé.
Me tomé una fotografía que me parece épica. La única foto de mi larga vida en la que salgo sonriendo como debería ¿Cómo debería? No sé, pero me sentí muy bien cuando la vi metida en mi cámara. Ahí quizás la puedan ver, con una fotogénica amiga a mi lado y yo con mi vestido rayado sin saber que me estaban tomando una foto.
Por otro lado, estoy increíblemente feliz. Créanme, jamás he estado más feliz que ahora. He regresado a tener sueños completamente raros pero geniales, imito más voces que de costumbre y hago las tonterías más radicales en el colegio. Amo aprender, amo ir al colegio, amo estudiar, amo a mis amigos y amo oponerme a la gente estúpida y salvaje.
Estoy con más energía que nunca, difícilmente encontraré algo que me haga sentir triste. Mañana le llevo mi violín al director de la orquesta del colegio para que me lo afine, mi segundo violín porque lo compré de contrabando en la frontera. Ya les contaré como fue esa experiencia, a mi me encantó.
¡Por cierto! Sigo corriendo todos los días a la cinco cuando todo está azul, riquísimo y solitario. Mañana comienzo a hacer algo nuevo pero igual de positivo. Siempre procuro terminar algo temprano para llegar a casa a escuchar el espacio de Radio Maldita (107.7) y sus parodias a las demás radios. Esos tíos son lo máximo, después de pensarlo bien, me gustaría algún día participar en una radio, aunque sea haciendo promociones a discotecas y sorteos de canastas.
Dios bendiga el colegio. Hoy día nos hablaban de la universidad y no puedo estar más emocionada, haré todo lo posible por alcanzar mis sueños, es una promesa conmigo misma, jamás voy a abandonar mis cuentos ni mis poemas ni mi violín ni mi piano ni mis amigos ni mis enemigos.
Espero escribir en éste sitio hasta el final de mis días.
Un enorme abrazo,
Req.

sábado, 12 de marzo de 2011

Esta Noche II


Esta noche espero ver luces en todos lados.
Esta noche ojala que haya frío afuera y que llueva cuando lleguen las doce.
Esta noche espero caminar por todos los rincones, buscando colores.
Esta noche espero quedarme medio-sorda por la música.´
Esta noche espero abrazarme con amigos.
Esta noche espero que todos pasen un increíble momento.
Esta noche espero sentir que tengo alas.
Esta noche espero olvidarme de mis pesadillas ridículas.
Esta noche espero adrenalina.
Esta noche espero líquidos nirvánicos.
Esta noche espero hablar y mandar al diablo todo sin tapujos.
Esta noche espero ser feliz.

Esta noche.
ESTA NOCHE será la noche.
Espero que mis telas rotas del pasado se queden atrás.
Y les pase un camión encima.



Req.

Esta Noche I

Hoy día es el cumpleaños de una amiga del colegio. Le deseo un feliz cumpleaños, espero que en éste sábado tan peculiar todos sus sueños se cumplan, se siente increíble cuando se te cumple lo que deseas, aunque a veces no duren para toda la vida. Ejemplo: Yo en mis cumpleaños y en año nuevo. Pero esos temas muy aparte que no tengo porqué tocar.
Estoy comiendo naranjas, faltan unas horas para la gran fiesta que promete bastante. Habrán jugos de colores, líquidos nirvánicos que ayudan a encontrar la felicidad momentánea. ¿Quieren saber algo curioso? El año nuevo que pasé, fue casi sin ninguna gota de alcohol, creo que estaba más feliz por mi futuro que por la trepadora sangría, pero ésta noche todo cambia,
Nebulosas, humo, cosas de colores y risas sin parar, eso es lo que espero ver ésta noche. Espero ver gente muy feliz, espero pegarme a esa emoción que no siento desde hace muchos meses, la última vez que fui ciegamente feliz fue cuando celebramos el cumpleaños de mi padre hasta las tres de la mañana con unos vasos riquísimos en la mesa.
Créanme, no hay nada como los cumpleaños de mi papá con mi papá.
Esta noche voy a salir de mi cuerpo por unos instantes, voy a inaugurar mi prácticamente primera semana de colegio como debería de ser.
Mediré mis actos, no se preocupen por mi. Qué ganas tengo de escribir muy tarde, cuando me encuentre volando entre tormentas con un paraguas en la mano y cristales mágicos en la otra.
Feliz natalicio a la cumpleañera.
Y mis mejores deseos a todos ustedes, jamás se tiren al suelo, no me voy a cansar de repetirlo.
JAMÁS dejen que NADIE los tire al suelo.

Part 4: Dearly Beloved


Dearly beloved are you listening?
I can't remember a word that you were saying
Are we demented or am I disturbed?
The space that's in between insane and insecure
Oh, therapy, can you please fill the void?
Am I retarded or am I just overjoyed
Nobody's perfect and I stand accused
For lack of a better word, and that's my best excuse





Green Day - Jesus Of Suburbia (Part 4: Dearly Beloved)

jueves, 10 de marzo de 2011

Evitando El Desastre

Exámenes y doctores por todos lados, hoy siento como si correr no fuera suficiente para dejar atrás todo el desastre. Éste es el cuarto día levantándome a las cinco de la mañana, cuando las luces amarillas están muertas e iluminan unas calles que no tienen nada más que niebla para regalarme. Subo las escaleras estrechas del gimnasio, saludo al chico que atiende, al entrenador Stalin y subo a la sala donde en verano todos los jóvenes hacen piruetas mortales.
Corro escuchando música, miro a la gente pasar de un lado a otro, me hace pensar en que soy escritora, en que puedo ser Dios y he causado miles de nacimientos y muertes en éstos años de mi vida con tan solo un lapicero y una hoja.
Aumento la velocidad, el cuerpo me quema de los pies hasta la cabeza, las plantas me arden, las manos me sudan, toda aquella agua que mi cuerpo llora parece ser esa tensión espantosa, esos pensamientos horribles, las pesadillas que me asaltan por la noche, muertos vivientes, personajes de mi pasado que no valen la pena recordar desde que demostraron ser piedras humanas sin conciencia.
El cielo se ilumina, mis pantorrillas duelen pero yo sigo corriendo, tengo ganas de gritar, de gritar millones de cosas pero me trago todo porque abajo mi mamá me espera y los vidrios podrían romperse por mis palabras hirientes. Quizás mis distraídos receptores me escuchen y se pregunten cómo es posible que me afecten tanto las cosas. ¿No soy yo, una persona tan fuerte? Me rehuso a responder a esa provocación, a ese pensamiento tan falso de pensar que todo va muy bien sin preguntar, solo los muertos, los muertos se conforman con no moverse y suponer que todo va bien, cadáveres han sido muchas de las personas que he conocido en ésta corta vida.
Intento no derrumbarme, los poetas y los árboles morimos de pie, me he prometido morir de pie, hecha tronco y no astilla, hecha fuego mas no ceniza, a menos que mis hijos decidan cremarme porque el encierro sería espantoso.
Le dieron los exámenes médicos a mi papá y las cosas no están bien. Puedo suponer lo peor o que habrá una mejoría muy pronta. Mi mamá se sorprende ante mi insensibilidad, no puede creer que no reaccione como ella, sé que quiere llorar, pero no lo hace y yo tampoco. En mi familia todas las mujeres somos fuertes, no lloramos en público, solo frente a nuestra propia sangre, soportamos las maldades de la gente, los golpes del destino y no derramamos ni una lágrima en público, porque somos mujeres fuertes, todas las mujeres de mi familia mueren y morirán de pie, aunque no sean poetas.
Ésta noche oraré con una sensación que jamás había sentido; la de sentir la cercanía real del desastre. Ninguna cosa parecida me había ocurrido antes, que me arranquen a mi padre, es la maldad más espantosa del mundo, así como arrancarme a mi madre. Por más disfuncional que mi familia sea, no deseo que quiten piezas de mi tablero.
Ésta noche voy a tocar el piano y mañana saldré a correr si es que tengo fuerza, oraré para que mi padre sane, para que yo deje de tener pesadillas, para que Dios cure mi corazón enfermo y mi alma, que temo que poco a poco se vuelve la de un monstruo acorazado.
Tengo miedo que mi fuerza me trague, que me vuelva insensible, que no sienta pena y me prive del derecho de llorar como todo ser humano. Tengo toda la fuerza del mundo en mi pecho para echarme a llorar al piso como solamente he hecho pocas veces en ésta vida, pero no lo hago.
"Mujer de acero" me dice mi papá siempre "Tu tienes que ser una mujer de acero".

lunes, 7 de marzo de 2011

Yo Corro

¿Quieren saber qué hice esta mañana? Aunque no les importe, les diré; me fui a correr a las cinco de la mañana hasta el ataque de asma fatal mortal y casi me muero, pero valió bastante la pena. ¿Y saben POR QUÉ lo hice? Porque tengo una nueva filosofía que quizás solamente me guíe a mi auto-destrucción o de lo contrario, a la superación total.
Correr significa para mi enfrentarme a todos mis miedos.
Cuando corro, me imagino que atrás está todo lo que me jala de las patas hacia ese inframundo de la tristeza que conozco de memoria, oh sí, soy una caserita de las depresiones pero no tengo la menor intención de regresar a aquello.
Y pues, si me detengo sé que me van a comer viva y ya saben cómo terminan esos momentos. Salí cuando las calles estaban vacías, habían charcos de agua por todos lados (quién sabe porqué, porque que yo sepa no está lloviendo), el cielo estaba medio azulino y blanco, solamente podía escuchar la música de mis audífonos. Hice una lista especialmente para correr y créanme que es de mucho ayuda.
Ahí, en la desolación de una ciudad que recién despierta, estaba yo, la poeta que siempre fue un vegetal, haciendo lo que siempre odió: Correr. Odio hasta ahora correr en clase de educación física, pero en la mañana fue distinto. Corrí con fuerza, exigiéndome todo y por un momento pensé en lo heroico y estúpido que sería morir corriendo, comprendo morir escribiendo, haciendo un soneto o actuando en un escenario... pero morir corriendo no es para mi, es para los deportistas, para la gente que lo hace todos los días y le ha tomado cariño a esa sensación de estiramiento muscular.
Me estoy yendo de tema ¿Verdad? Es términos generales correr es enfrentarme a mis miedos. Siempre he tenido miedo de correr porque terminaba en la clínica, zona de emergencias, pero no puedo esconderme de las zapatillas por siempre. ¿Comprenden a qué me refiero? Simplemente NO PUEDO ESCONDERME y aunque me duela, aunque termine en el hospital (está bien, seré extremista) aunque me muera de asfixia, tengo que dejar de tener miedo.
Porque les confieso que hoy me di cuenta que hasta ahora, a mis 16 ridículos añotes y con toda mi capacidad, le tengo miedo hasta a las cosas más absurdas. ¿Quieren una lista? Jódanse, porque no sería interminable, pero unos comentarios no matarían a nadie. Le tengo miedo ¿A qué? A mirar a la gente a los ojos, a saludar en situaciones extrañas, a pensar en desgracias porque pueden hacerse realidad, a mirar a los nevados cuando viajaba a la sierra, a ver personas desconectadas y conectadas, es ridículo, absurdo, detesto el hecho que tengo miedo hasta de mi propio reflejo.
A veces me digo ¿Esa soy yo? Vaya, pero cómo han cambiado las cosas. Regreso a casa, piso tierra, me doy cuenta que no puedo seguir riéndome en el colegio para llegar acá a tocar piano como si fuera lo que me diera de comer y de beber.
¿Quieren que les diga de verdad qué pienso?
Creo que voy a regresar a una depresión muy fuerte, puedo sentirla, pero me aferro a todo lo que puedo para no llegar a ese límite de nuevo, soy capaz de implorar de rodillas, no quiero regresar a esas semanas de aislamiento, de canciones lentas, de cuadernos llenos y de quedarme en blanco por horas.
No estoy muerta, no estoy muerta, no me estoy muriendo, no me voy a morir aún, solamente puedo pensar en eso.
Yo corro, amigos míos.
Ahora es cuando pienso que siempre he corrido.
Siempre estoy corriendo lejos de todo.



Abrazos bohemios,
Req.

domingo, 6 de marzo de 2011

Corazón Abierto

Estaba esperando a que mi mamá saliera de comprar. Esperaba cerca de la puerta del centro comercial cuando de repente vi a una niña flaquita, con lentes y frenos en los dientes que tenía la cabeza apoyada en ambas manos, temblaba un poco, usaba zapatillas azules y ropa de colores suaves.
Ese "no-se-qué" maternal que tengo dentro me obligó a acercarme.
-¿Estás bien?- le pregunté -¿Qué pasa?
Me miró con sus ojos vidriosos ocultos tras las gafas y estalló en un sollozo desgarrador. Me hizo acordar mucho a cómo lloro yo, siempre reprimiendo todo hasta ya no poder. Me senté a su lado e imploré que mi madre se demorara.
-No es justo...- me dijo temblorosa, limpiandose la cara con
las manos -Íbamos a durar para toda la vida ¿Por qué me hizo eso?
¡Nos queríamos!
Esa pequeña tenía como máximo quince años. Mi corazón se encogió por debajo de la ropa y de la piel, sentí que mis ojos mismos se llenaban de lágrimas y la abracé sin cerrar los ojos, ella se aferró y siguió llorando.
-Tranquila, respira, respira.
-Pero me duele ¡Me duele muchísimo!
-No dejes que te deje una cicatriz- le dije -Llora hoy día,
pero no lo hagas más en el futuro, no pienses en éste día nunca más.
-No puedo.
-Sí que puedes. Sé lo que te digo, tienes que ser muy fuerte, ese imbécil
no sabe lo que se pierde.
-¿Tu crees?
-Estoy segurísima. Toma agua y regresa a tu casa, piensa que
ésto no es más que una pesadilla, no vuelvas a recordar este día.
-¿Cómo sabes que va a funcionar?

Me limpié la cara porque me había puesto a llorar también.

-Porque he vivido 16 años haciéndolo y no estoy tan mal.
-¿Te han hecho daño también?

Mi mamá me llamó, me despedí y me fui. La dejé con la pregunta flotando en el aire, me sentí confundida, preguntándome porqué estas cosas solo me pasan a mi. Volteé para ver a la niña por última vez y ella solo me sonreía mientras se limpiaba la cara. Le devolví la sonrisa.
Me gustaría encontrarla en unos años y saber que funcionó, que es una mujer fuerte.
Que quizás llegó a ser más fuerte que yo.

Escupitajo #11:

Tenía clases de teclado cuando era muy chiquita pero parece que en esos años no me interesaba tanto como ahora. ¿No es un poco ilógico? Comienzo a tocar violín y de repente me nace regresar con mi pequeño Ludwig, que por fin ha sido instalado correctamente en mi cuarto. He estado tocando como casi tres horas seguidas, contando con las de ayer en la noche quizás algo más. No me he detenido hasta perfeccionar esas canciones cristianas que el colegio nos da y alterándolas a mi gusto, por ahí encontré mi partitura de "Yesterday" de los Beatles y fue muy relajante. Podría pasar el domingo escuchando a Tiersen y recordando cosas innecesarias, ya les he dicho que los domingos son generalmente días aburridos, tediosos, espantosos, desagradables, monstruosos como los exámenes de matemática.
Pero en fin. Me olvidaré que hoy es domingo, seguiré en mis partituras, veré televisión a buscar esas series policíacas que tanto me gustan y veré que más puedo hacer.
Pero ojo, aclaro que no planeo estar triste hoy día. Ayer fue solo una noche de crisis, todo es un proceso muy largo, extraño mucho a Connie y mis sesiones de rehabilitación.
Tengo un poema sobre la palabra que tengo que hacer para mañana, me alegra regresar al colegio.
Pensando bien las cosas, creo le estoy guardando rencor a mis vacaciones.
Por lo menos a una gran parte de ellas.
Abrazos bohemios,
Req
PD: Cuando piensen en rendirse, imagínenme con una sierra eléctrica en sus habitaciones a la medianoche. Conclusión: Jamás abandonen lo que aman, solo los muertos dejan a sus seres queridos sin remordimientos ni razones. ¡Paz! :]

sábado, 5 de marzo de 2011

Escupitajo #10:

Lamento mucho ser un drama con patas. De verdad que me gustaría dejar de ser un drama de vez en cuando, pero es casi inevitable. Supongo que tengo la exageración en las venas, pero me lo llevo muy bien ahora que estoy tranquila después de dos horas de piano perfecto. Tuve que tocar para tranquilizarme, no hay nada mejor que sentarme a tocar y que nadie me moleste hasta que termine de desfogar mi confusión. Vaya, son las once de la noche y estoy muy cansada, pero quiero seguir escribiendo, regresar a tocar a mi habitación (¡Sí! ¡Ahora el teclado está mi cuarto por fin!) y pensar en éste olor a chorizo que entra por las ventanas. Por un momento pensé que me estaban cocinando algo delicioso, pero todo es creación de mi hambriento organismo, tendré que conformarme con yogurt. Qué triste.
Lo bueno de tener el drama implantado en mi cerebelo es que todo lo siento más fuerte, en especial ahora. La luna es más que la luna, un libro más que un libro, un poema más que un poema y el dulce más que solo dulce. ¡AH! Debe de ser por eso que soy una fanática de los escenarios y no puedo vivir sin actuar por lo menos una vez al año. Espero con ansias las dos obras en donde nos toca participar éste año, creo que ya les dije que necesito volver a escenarios y gritar, patalear, ACTUAR en términos generales.
Hijos míos, lamento mucho tener que hablar tontería y media, pero por algo éstas entradas pequeñas se llaman Escupitajos. Mientras las escribo puede que esté extremadamente cuerda o extremadamente demente, crítica, insana, "depresiva".
Y bien, voy a regresar a mi piano, la noche es joven y tengo que aprovechar mis sábados. Tengo que hacer un poema para el Lunes, puedo elegir lo que sea, pero prefiero un poema para demostrar qué es la palabra para mi.
Amo mis fines de semana y los quiero a todos ustedes que tienen el tiempo (¿De verdad?) para leer éstos frutos de una orate.
Paz a los que cometemos errores y somos felices.
Req.

Escupitajo #9:

No estoy depresiva. ¿Me escucharon bien esas orejas sucias allá afuera? Que NO estoy depresiva. Quizás ahora lo único que puede preocuparme es la salud de mi papá, sobrevivir al coleigo y preguntarme porqué seré una persona tan monstruosa.
¿Quieren saber POR QUÉ soy un monstruo? Porque me oculto detrás de la música, de mis libros y de mis escritos para que nadie jamás JAMÁS logre descubrirme de verdad y siempre termino perdiendo. ¿Consecuencias? Termino muy feliz, aislándome de mis amigos y dedicándome a cosas vanas que puede que jamás me llenen, escucho música para no pensar ni imaginarme cosas negativas sobre el futuro que me puede rodear porque mi papá fue al doctor y le dijeron que está enfermo y tiene que comenzar a cuidarse.
¿Por qué no puedo hacerme piedra y ya está? ¿Por qué tengo que ser tan horrible, tan monstruosa, tan vil y maligna? ¿Por qué tengo que matar de verdad a todos los que me rodean? ¿Estan seguros que no soy solo un virus en éste mundo que se encarga de contaminar a todos?
Me avergüenzo de todo lo que he hecho hasta ahora si es que no puedo hacer feliz a nadie. Me rehúso a llorar por mi condición, me lleno las orejas de música y los ojos de novelas solmanete para distraerme, para no pensar "Oye... de verdad estás malogrando y pudriendo todo tu entorno como el clavo oxidado de la caja".
No sé qué necesito, no se a quién hablarle, tengo muchas orejas que podrían escuchar cómo lloro y me quejo y me deshogo pero no se cual es la indicada. No sé si quiero a Sarah, si quiero a Ana o a Rosie o a cualquiera de mis amistades, me siento desolada e irónicamente triste, porque la música que sale de mis audífonos no es nada depresiva.
No tengo nada que hacer, me siento morir por adentro pero afuera todo tiene que estar bien ¿No es cierto? Tengo que reírme y ser feliz, actuar como si nada pasara, como si nada hubiera pasado jamás. Me atacan por todos lados, todos quieren matarme, necesito a Connie mi enfermera de la rehabilitación, incluso me gustaría que ella me escuchara aunque jamás hemos hablado demasiado en éstos cinco días.
Te quiero mucho papá.
Lamento haber sido un monstruo éstos 16 años de mi vida.
Lamento haber sido una asesina serial sin sangre en las manos.
Req.

Desvanecida

No soy más que una marca de luz lunar,
soy una muerta que ríe
una broma sin ecos en una habitación sin risa
soy madera triste de un escenario
lleno de historias

Que se arranquen mis cabellos secos, fragancia
a flores de cementerio
para hacer ramos de ortigas felices
allá, para los recién casados sin iglesia
para los amantes desgraciados
que se alimentan de palabras

Estoy más muerta que nunca, jamás he sido
más fiambre que en ésta tarde
pantallas encendidas / luz desperdiciada
derramo espectros invisibles
porque me he quedado sin lágrimas

Estoy tan muerta que no siento tristeza,
he extraviado el placer, la hormona
esquivo las escenas felices, callejeras
me oculto del sol,
soy la que fui hace años

Estoy tan muerta que exijo soledad,
que reclamo mi sepulcro inexistente,
soy un cadáver con manos sumergidas en música
pero las teclas han corrido
estoy tan muerta,
que las cuerdas me han abandonado

jueves, 3 de marzo de 2011

Día 3

Aún no sé el nombre de mi enfermera, pero por el momento me gustaría llamarla Connie. Verán, yo no tengo una buena relación con las personas relacionadas a la medicina, la mayoría cree que tengo un serio problema mental, algo como sociopatía y que soy un peligro y lo mejór sería doparme en vez de interactuar. Quizás exagero. Connie me trata con una naturalidad dulce que no tiene manera de expresarse, cada vez que llego a la sala de rehabilitación y terapias, busco sus zapatos (las famosas y cómodas crocs plásticas) debajo de las cortinas donde se trata a cada paciente y luego le entrego ese ticket arrugado que me da la señorita de la recepción. Mis terapias no duran más de media hora, a veces un poco menos, la verdad es que allá adentro pierdo toda la noción del tiempo. Volvamos con Connie.
Connie me hace recordar a la esposa de mi profesor de violín, tienen el cabello parecido y una expresión facial muy dulce. Pero entre estas dos mujeres, debo de admitir que he interactuado más con Connie que con la mujer del violinista. Tiene el cabello negro, una sonrisa muy bonita que me inspira confianza (a diferencia de las de propagandas de Colgate que me espantan por su sentido comecial) y unas manos milagrosas. Los masajes que me hace después de los trapos calientes y todo lo demás son sinceramente angelicales, parece que mi problema de contracción cervical estará resuelto después de éstos diez días.
Ajá ¡Pero ése es el problema! Solamente diez días visitando a Connie y a sus crocs celeste-enfermera. Me da mucha pena pensar que no tendré que regresar después del colegio. La rehabilitación me está poniendo de buen humor ¿O será un efecto secundario de haber pasado meses difíciles de vacaciones? Estamos de flojos en el colegio, aún las clases no se ponen duras e infernales. Aún.
Regresé a pie del colegio con Melissa después de mucho tiempo. Luego que descubriera los chocolates que Laurence me regaló en una de nuestras secretas reuniones en donde Melissa nos ayudaba, mi mamá mira a mi querida amiga con mucha desconfianza. Pero tiempos pasados son tiempos pasados y honestamente me parece una amistad que quisiera conservar de por vida. Uno no consigue amigos retorcidos y orates así por más, tienes que tener una suerte única.
Me duelen aún los pies porque yo soy prácticamente un vegetal, solamente camino dentro de mi casa para buscar alimento y cobijo. Los días se pasan rápido en el colegio, no tengo casi nada de qué quejarme, solamente el mamarracho que han hecho con la estructura educacional. Exámenes, pruebas, calificaciones, registros y comedores que nunca llegaron, han sido mezclados en una sopa espesa de confusión y ahora ni siquiera sé qué estudiar ni cómo hacerlo. Fatal. Con el tiempo, creo yo que todo tomará rumbo propio, así como hacemos todos después de tiempos mezclados.
Me sigo desviando del tema. Connie es una enfermera (le digo enfermera porque no sé si su profesión tiene otro nombre, no se lo he preguntado) fenomenal, si yo fuera una anciana rodeada de libros en una mansión con puertas secretas, la llamaría a ella para que me cuide hasta el final de mis decrépitos días. Hoy día le conté que gané concursos a nivel nacional (sí, casi todos los escritores somos algo narcisistas muy en el fondo) y que el libro que estaba leyendo (Galloso: Gran talento) se ponía mejor con cada día.
"Entonces tú no lees a Bayly" me dijo riendo y yo no pude hacer otra cosa que idolatrar sus palabras. ¡Por fin! ¡Por fin alguien en éste mundo parece comprender mi posición! Le comenté una que otra cosa sobre mi posición acerca de él y su novia y luego nos despedimos. Mañana regreso, el sábado también. Estoy muy feliz de ir a rehabilitación; definitivamente ÚTIL.

martes, 1 de marzo de 2011

El Cisne Negro

La imagen penetrante y peculiar de Natalie Portman en la gran película "Cisne Negro" sea quizás uno de esos rostros que inspiran misteriosa inmortalidad. No pude ir a ver el film en el cine por cuestiones de tiempo y falta de ganas, a pesar de que siempre me llamó la atención ¿Por qué? Principalmente por la presencia del ballet.
El arte es un mundo muy ajeno al común, los músicos, los bailerines y toda clase de artistas tienen una disciplina que aprenden a controlar. Horas de ensayo, dedicación y privación de ciertos placeres, todo para alcanzar la tan soñada perfección e inmortalidad en el área.
Nina es la mejor bailarina en su compañía de ballet, tiene los pies destrozados por el esfuerzo, ensaya desde que se levanta y jamás deja de exigirse. Ésta chica es el personaje principal de la película. Guarda en sus acciones y personalidad una realidad que muchos ignoramos: la vida detrás de las cortinas y los sacrificios que ésta exige.
Soportando a una madre aún sumergida en la infancia de su pequeña, Nina decide participar en "El lago de los cisnes" y busca desesperadamente ser la Reina Cisne, transformándose en una sola noche en el Cisne Blanco, ícono de toda la bondad de una princesa atrapada en el cuerpo de ni un animal, y en el Cisne Negro, hermana lasciva y maligna.
La aparición de Lily, una bailarina totalmente cadente de disciplina, gran conocedora del mundo del libertinaje, amenaza el sueño de Nina, haciéndola sentir perseguida y acosada por muchos enemigos.
"Cisne Negro" no es una película de dramas entre bailarinas, romances entre colegas y finales heroicos. Las emociones que produce en el público son inexplicables, una maravillosa mezcla de suspenso con admiración, ternura y quizás hasta compasión por la pobre Nina y su vida que poco a poco, va dando vueltas en espiral.El no tan conocido director Darren Aronofsky, se lució completamente en ésta oportunidad, representando una metáfora entera en 103 minutos.
La complejidad de la mente humana, el hecho que quizás todos estamos partidos en dos pedazos totalmente distintos y solo hace falta una chispa para liberar a uno de ellos. Nuestro deseo de ser perfectos, es quizás uno de esos tantos oscuros caminos que atraen la maldad hacia nuestro corazón.
Excelente película, un soundtrack espectacular así como los efectos especiales. Se la recomiendo a todos ustedes, pero una pequeña anotación, por algunos desnudos y escenas eróticas, no es recomendable verlo en familia.

"La única persona en tu camino eres tú. Es hora de dejarla ir. Piérdete"

12 & Un Continuar

Doce casilleros tiene ahora mi horario escolar. Así como lo escuchan, DOCE rectángulos felices en esa hoja de papel que aún no elaboro. ¿Pero les digo algo curioso? No me molesta ni me da pena quedarme más o menos tiempo estudiando. En las últimas noches he tenido muchos sueños, soñé que mi cabello se volvía blanco y me lo cortaban hasta dejarme con un peinado parecido al de Claudia de "Entrevista con el vampiro" cuando se corta los rizos en un acto desesperado por cambiar. En mi sueño yo tenía rizos castaños, me observé originalmente después de mucho tiempo. Luego soñé con abejas, como quien mira un documental de la naturaleza en televisión. No recuerdo más detalles, tampoco voces ni personas conocidas, ya no sueño con mis amigos, ya no sueño que nadie se va ni que nadie se queda.
Soy un ser que va partiendo su propia existencia en dos. Mi alegría indiscutible del colegio y mi actitud callada y reflexiva en casa, a veces quisiera saber quién es la que se va a quedar conmigo, tengo ésta división desde la infancia, desde siempre.
Nos han mezclado mucho en el colegio, casi todas mis compañeras están en el otro salón, he regresado a compartir oxígeno con mucha gente a la cual no hablo desde hace años. Y digo hablar tratando de decir de manera corta: "establecer diálogos largos y significativos".
Primer día de colegio, pero siento que no hubiera dormido en mucho tiempo.
Solo puedo anhelar a llevarme bien con los profesores nuevos, controlar mi crudeza al hablar y no crear problemas en éste último año. Hay una niebla algo triste que cubre los rostros de todos, nos veo más viejos. creo que hemos crecido algo éste verano.
No tengo demasiado qué decir, para que todo regresa a la normalidad, aunque quizás no de la manera que debería, pero lo hace. Extraño mucho a Ana Lucía y nuestras charlas filosóficas en matemática, a ella y a muchas personas más.
Hoy tengo mi segunda sesión de rehabilitación por la tarde, quisiera escuchar el soundtrack del Cisne Negro mientras todo ocurre, me ayudará a relajarme.
Necesito un postre muy helado, dulce y colorido.
Lástima que ya cerraron el único puesto de raspadillas que vale la pena visitar en éste distrito.



Abrazos,
Requiem





PD: Mi profesor de matemática
renunció después de unos tres años creo, no sé si fue porque estaba cansado o
porque la idea de enseñarnos de nuevo lo aterró, no porque tuviera miedo, si no
porque normalmente mi promoción y yo causamos daños severos al personal
docente.

Adorable


Soñar con perfección es soñar con espejos,
es crecer y al mismo tiempo achicarse,
es embellecerse hasta ahogarse en fealdad


Es flotar en nubes de colores, de tormentas
ajenas y bipolares
es oler a cabello en lavanda, a fragancia
de marrano precoz
ser perfecta es despellejarse,
llenarse de vendas


Buscar la perfección es alimentarse,
de estacas e historias olvidadas
es maquillarse sin tener rostro
y escuchar música,
siendo uno sordo


Los seres perfectos no tienen forma,
son como vapor en el vidrio abandonado
como fantasmas despreciados, con
mucho o nada qué elaborar con los vivos
los perfectos son los muertos
por su callada independencia