martes, 29 de noviembre de 2011

Regresos Míos

Dicen que la felicidad nunca cuenta buenas historias. Comienzo a creer que el desdichado que dijo eso, a parte la infelicidad, poseía una gran inteligencia. Las semanas han pasado rápidas, con una lentitud bastante escondida. Hay hambre, desesperación, música, conflictos emociones y a pesar de todo me atrevo a decir que existe la felicidad. ¿Cómo así? No me pregunten. Yo, de entre todos, soy la que menos podría definir la felicidad.
Lo que nunca he probado
El sábado después de una pequeña ceremonia en el colegio fui a beber y desahogar todo mi aburrimiento en líquidos de colores y tragos largos. No mandan a alcohólicos anónimos: Solo soy humana, poeta y demente. Después de decirle a todos los presentes que los amaba, hablar de lingüística, paz mundial e intentar caminar derecho con todo lo que traía encima, regresé a casa a la una de la mañana. No sé en qué momento mis padres dejaron a mis amigas en su casa, solo sé que llegué a casa con mucha hambre y me levanté a las seis de la mañana con ganas de tocar violín.
Oh, problema: Siento que ya les he contado esto. ¿Lo he hecho? No es importante. He regresado ¿No están felices de verme? No, no me respondan, olvídenlo. 
Me he vuelto una persona siniestra que se ríe demasiado y no puede escribir. Anoche terminé un cuento de tres páginas sobre conciertos, aristocracias y teatros; mi cerebro ha perecido, jamás me había tomado tanto tiempo escribir algo que llevo tanto tiempo en la mente. ¿Por qué? Porque estoy feliz y la felicidad no vende buenas historias. Perdonen, sé que suena horrible, pero aquel desdichado que lo dijo, es probable que tenga toda la razón. Erotismos. Solo pienso en mis caprichos, en la música, en la muerte, la vida, mis citas con la psicóloga, el colegio absurdo y terrible que solo tiene de bueno la compañía y mis pequeños amigos que dejaré en algún momento. ¿En algún momento? Dentro de tres semanas,carajos, tres semanas y me largo de este sitio. ¿Eso debería de darme tristeza o felicidad? ¿Placer o dolor? ¿Ganas de irme o de quedarme? ¿Leer o dormir en clases de números? 
Lamento haberme desaparecido por tanto tiempo. Qué terrible me siento. 
Lo siento, de verdad, ahí en el fondo, he extrañado este sitio como tienen la mínima idea. 



Con infinito amor, 
Requiem .


jueves, 24 de noviembre de 2011

Adagio

Ya no me conoces, rosa mía. Hoy me crucé contigo, así como miles de veces en los últimos días y ni siquiera pude sentir tus ojos negros de desprecio. ¿Lo haces en serio? ¿No es otra de tus bromas, otro de tus juegos de indiferencia? Quisiera saber si en realidad me odias, rosa mía, si fue mentira cuando me dijiste, tan sonriente y sencilla que me perdonabas. Borrón y cuenta nueva, éramos amigos de nuevo, hasta que pasó el fin de semana y te desvaneciste en la nada que siempre será nada.
Pasas de largo como si fuera un fantasma, me das la espalda, me das tu cabellera negra y que me encanta ver sin amarrar, pero nunca tu rostro.
Hace poco busqué tu mirada en una tarde de sol y me encontré con el frío más profundo, ese frío que solo se siente en el infierno. Tú me comprendes, espero que puedas hacerlo. Quizás yo nunca te comprendí y ese fue mi error más terrible. ¿Te acuerdas de nosotros? Yo sí, aunque no debería.
Me pierdo en la duda, en la nada. Quiero olvidarte, te soy sincero, quiero arrancarme las espinas de tu amor y olvidarme que por un momento, solo un momento, te hiciste débil en mis brazos y pude matarte con solo una palabra, con un tacto suave de mi maldad.
Y parece que lo conseguí.
¿Te he matado? ¿Estás acaso muerta y fingues todo el tiempo, o el muerto soy yo?
Qué quieres de mi, rosa, qué esperas que yo haga. ¿Hablarte con mi rostro de culpabilidad? ¿Llamarte sabiendo que me desprecias, después de tantos días de silencio?
Si me desprecias, dímelo y si aún me amas, ahí en el fondo, también deseo saberlo.
Lo lamento mucho, rosa, nunca quise cortarte el tallo y devorar tus pétalos. Yo te quise, te quise mucho, por favor, todo menos tu indiferencia.
Dentro de unos días, tendrás la oportunidad de dejarme para siempre.
Y entonces ¿Qué será de mi, de nosotros, de nuestra historia inonclusa?
¿Qué será de nuestra poesía, si no es terminada por los dos?


martes, 22 de noviembre de 2011

Resfríos



Ni tu tacto gentil y nocturno debajo de sábanas frías
ni mucho menos tu mordida licántropa y repentina
no hay tibieza en tu verbo adornado
viene la luna y tú, tan apagado

Ni tu mirada sonrojada en las horas sudorosas
ni mucho menos el botón desabrochado de tu frenesí
no hay suspiro cansado, tampoco un gemido
viene la luna y tú, tan dormido

Ni tu ebriedad constante en el reloj frívolo
ni mucho menos tus pies jueguetones de invierno
no hay verdades en tu deseo de estación
viene la luna, y tú sin pasión

lunes, 21 de noviembre de 2011

El Limbo

El día domingo me levanté a las seis de la mañana sabiendo que si me caía al primer intento de salir de la cama, iba a ser totalmente por mi culpa, por mi gran culpa y por supuesto, por mi impulsiva juerga de la noche anterior. Tomé una ducha,casi me saco la mugre al inicio pero sobreviví. Comencé a tocar la Suite N° 2 de Bach en la sala hasta que mi mamá vino a decir que si se me quitó el sueño y a preguntarse internamente porqué su hija tiene que estar tan chalada y mal de la cabeza. Nos amamos. A las ocho, Sarah tocó la puerta, mi amada Sarah y estuve hasta casi las dos de la tarde hablado con ella y contando nuestras hazañas, desgracias y pequeñas felicidades que han sucedido desde que no nos veíamos, es decir, casi un año y algo más. 
En la Ceremonia en el Colegio con Ana e Ivonne
Tomamos un desayuno a base de té no-inglés, huevo frito y pan, estuvimos en mi habitación hablando de poesías, de la vida y de música, almorzamos en el KFC de la vuelta y a veces yo me reía, porque yo estaba sin voz, ronca como un marinero ebrio y descorazonado. Se preguntarán qué demonios hice el sábado. Pues nada que no se haga un sábado: Perderme en el limbo del alcohol, la risa, las amistades y los tacones negros de profesora de lengua. Después de una emotiva ceremonia en el colegio, todos nos fuimos a casa de una amiga y bueno, fue una noche de vino, cubalibre y bocaditos salados. Lo único que recuerdo es que me divertí mucho y que pasaron cosas muy alucinantes, me enteré de una serie de secretos y hoy día lunes, en vez de preocuparnos por los interesantes procesos de las funciones matemáticas, repasamos de inicio hasta fin esta fiesta de Noviembre. Me recogieron en la madrugada, no recuerdo en qué momento dejamos a mis amigas en su casa, pero sí recuerdo que me tiré en mi cama muy sonriente y desperté con ganas de tocar violín. Sarah entendió que a veces se me fuera la voz mientras le contaba del colegio, de mis problemas y de mis hazañas (sí, hazañas). 
Hoy me dormí en clase de inglés, de matemática, intenté dormir en Economía pero estaba demasiado interesante y hoy dormiré plácidamente, a menos que decida comenzar a pensar. Por un momento me sentí un poco triste en la salida, pero una canción me salvó el sentido del humor.
Hoy día me tomaron un examen psicológico en mi terapia. Era para marcar verdadero y falso y una de las oraciones decía:  No he visto un carro en diez años. ¿Me río? Semanas para terminar el colegio, estoy de buen humor, muy cansada y con hambre, pero de buen humor. 


Con amor, 
Requiem. 




jueves, 17 de noviembre de 2011

Agotarse No Basta

Anoche un anciano de 75 años murió en un hotel en Cusco por consumir Viagra. En realidad es una noticia que por la mañana, en el momento del desayuno (sí, siempre pasan muertes a la hora del desayuno, que no les sorprenda), no me causó ni pena ni tampoco risa. Normalmente podría haber despertado mi humor negro, sería algo como decir: En su intento por revivir algo, terminó paralizando un todo. Sí, ahora sí me dio risa. 
Amo esta imagen. 
Mi vida continúa en una rutina desagradable de días largos que se pasan cortos, siestas en clase y un libro llamado Delirio de Laura Restrepo que me tiene embobada con tanta creatividad y narrativa excelente. ¿Comprenden que amo este libro? Oh, para que yo venga a decirles algo así, supongo que tiene que ser realmente brutal y supremo. Sí, Delirio es brutal y supremo, créanlo.
Tengo esa sensación de cansancio en los párpados y una madre preocupada diciéndome que es tarde y que por Cristo, deje de ser una adicta a las computadoras y a escribir de esta manera tan libre y sinvergüenza en un blog que según ella, no tiene nada de importante. 
Bueno, tienes que estar muerto para saber qué es la muerte. Supongo que simplemente no comprende ciertas cosas de su hija, pero no puedo decir nada, porque yo tampoco comprendo ciertas cosas de una madre. 
Cosas que se me ocurren, tengo ganas de escribir, pero cuestiones biológicas y mentales me impiden quedarme el tiempo necesario.
Espero encontrarme con Sarah, mi eterna y siempre extrañada Sarah, el domingo por la mañana. 
Qué ganas tengo de invitarle un té y charlar de la vida hasta que los relojes censuren nuestra felicidad. 
En cuestiones poco importantes como es el manoseado y ahora casi irrelevante tema de Ludovico, cada día me lo tomo de mejor manera. He hecho una nueva amiga en el colegio, cuando lleguen mis vacaciones les contaré la historia dramática y perfecta de cómo he conocido a una persona peculiar e increíble.
Me iré a dormir, o por lo menos a intentarlo, como de costumbre, pensar en la oscuridad del techo es fascinante cuando estás pensando en luces y cosas como LSD todo el día. 
No consumo drogas, por favor, dejen de considerar esa posibilidad, solo era una frase. 


Con amor, 
Req. 

Jueves 16

Para que sangre tu amor
cortaré la yugular de tu recuerdo
para que drene tu memoria
abriré en canal la garganta del placer

Ah, voy a partir en dos el cariño antiguo
para que jamás nos unamos de nuevo
voy a incinerar las hojas de nuestro libro
para que el amor jamás nazca de nuevo

Para que sangre tu amor
arrancaré las entrañas de tu risa
para que sangre nuestro amor
olvidaré con dolor tu vida

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Qué Sabremos

Qué sabrás tú de la vida, en tu poesía tan tímida, qué sabrás de los versos que se ahogan en sentimientos y qué sabrás del vino, de las guitarras y de los paseos nocturnos. Qué sabrás tú de la vida, qué sabré yo de vivirla.
Qué sabrás tú del amor y de los demonios que nacen de su vientre acogedor, qué sabrás de la risa y del llanto de mujer. Por qué comprenderías las sinfonías y los abrazos, qué sabrías de las noches largas, de los poemas cantados, de los balcones y de los domingos cuando está oscuro ¿Recordarás en algún momento esos detalles que ahora detestas? Te ríes, te ríes de las cosas , pero qué sabrás tú de la risa y qué sabré yo de reírla.
Qué sabrás de la luna redonda y de la palidez que te ilumina, qué sabrás de las estrellas que se ocultan en el humo y de los acordes que jamás dibujaron la felicidad en tu corazón de hielo.
Pero qué sabrás tú de los corazones y qué sabré yo de sentirlos.
Qué sabrás tú de la libertad y de la esclavitud si simplemente no opinas nada jamás. Qué sabrás de gritar si solo susurras, qué sabrás de revoluciones si solo te sientas, observas, jamás lloras.
Qué sabrás tú de la vida y qué sabré yo de vivirla.
No sabemos nada, poeta, desconocido de mi memoria.
No sabemos nada.

martes, 15 de noviembre de 2011

Amargareta


Dedicado (lamentablemente) a ciertas mujeres indeseables
que llevaron a mis amigos a  la más humillante tristeza. 




Déjame que te llame, puta
que te nombre con tu nombre
oye tu, ramera,
déjame que te abandone

Escúchame, mariposa, flor extraña,
¿Extrañas mi polen con locura?
¿O mi magia,, sin vergüenzas ni cordura?
Oye tu, perra
déjame que te olvide

Óyeme, zorra ladina,
¿Aún buscas, hambrienta, alguna víctima?
A saciar tu sed de hielo, sangre y lascivia
Oye tu, potra
déjame que te desprecie

Noviembre 15

Ya no inspiras mis versos
ya no adormeces mi entrepierna
ya no coloreas mi risa
ni entibias mis tristezas

Ya no inspiras mis versos
tampoco mereces mi devoción
no mereces una caricia
ni un gramo de mi excitación

Ya no inspiras mis versos
ya no entretienes a mi alma
ya no te abrazas al recuerdo
ya no sientes nada

Ya no inspiras mis versos
tampoco mi dolor
no inspiras mi poesía
ya no inspiras mi amor

Secretos

Escrito en: Noviembre 10 



No crea tu corazón lozano
que te desprecio con débil encono
que te sueño en maldiciones
ahogado en el rencor de tus pasos

No crea tu rostro serio y bello
que te odio sin remordimiento
que te insulto en sueños
anhelando tu eterna soledad

No crea tu risa  dormida
que te amo como jamás lo he hecho
que te extraño en muertos besos
incinerando lo bello de tu recuerdo

domingo, 13 de noviembre de 2011

Cuerdas Eternas

Yo, que te entregué los sueños más largos y absurdos
yo, que me morí de hambre por escuchar cosas pendientes
yo, que compuse valses pensando en nuestras fechas
¡He sido apuñalada por tu amor y olvido!

Yo, que te escribí hasta la última gota de mi verso
yo, que dejé que me sangraras la pasión y la alegría
yo, que regalé mis silencios a tu recuerdo
¡He sido apuñalada por tu amor y olvido!

Yo, que me humillé en llanto frente a tu inmune figura
yo, que pisoteé mi credo y concentración por tu verbo
yo, que te conté mi vida, obra y desgracia sin cubrecamas
¡He sido apuñalada por tu amor y olvido!

Yo, que te esperaría todos los años que pidieras
yo, que ignoraría tu crueldad tan inhumana
yo, que olvidaría tu carencia de emociones
¡Seré apuñada por tu amor y olvido!

Cómo Fue



Me piden que te ame
¿Pero cómo amarte, si despierto solo tu desprecio?

Me piden que te extrañe
¿Pero cómo extrañarte, si en mi ausencia te afloran los amores?

Me piden que te odie
¿Pero cómo odiarte, si callas toda esperanza en tu boca seria?

Me piden que te ignore
¿Pero cómo ignorarte, si estás en todos lados, entre mis paredes?

Me piden que te espere
¿Pero cómo esperarte, si lo único que deseas es correr y verme a mi partir?

Cartas a Sarah VI

Querida Sarah:


Escucho otra obra media tropical y tranquila de Ibrahim Ferrer. Hoy día  te mandé mensajes mientras el sol me quemaba los brazos y el rostro. Espero que te haya ido en tu examen. ¿Te acuerdas cuando te dije que acaba de pasar por sorpresas, traiciones y demás? No estaba tan lejos de la realidad cuando pensé que todos nos estamos yendo al carajo. ¿También te estás yendo al carajo, Sarah mía?
¿Te acuerdas de esta foto? Fue hace tanto tiempo... 
No sé si recordarás al hombre de quién me enamoré hace poco y con quién terminé trágicamente (verás que la palabra tragedia me dará mucha risa de ahora en adelante) por cosas del destino.
Es más complicado de lo que crees, es peor de lo que parecía, es más complejo de lo que mi imaginación creó. 
Bailo salsa todos los días, Sarah, cuando nadie me observa y cuando tengo que sanar el alma. Mi papá me presenta chico, me anima, me habla de filosofía y yo bebo con más frecuencia pero es porque se presentan las oportunidades y no porque se me ocurra hacerme tragos en casa. 
No tengo que repetirte que te extraño, pequeña, extraño brutalmente tu presencia por estos lugares. Extraño mucho esas tardes grises de ironías y depresiones, extraño nuestras inútiles búsquedas por alcohol y lacear con mi plancha morada tu pelo tan curioso. 
¿Nos estamos yendo al carajo, Sarita? 
No siento nada y siento todo. Amo, odio, adoro, desprecio. ¿Algún día podremos explicarnos estos cambios, estas tonterías del corazón? 
Te extraño, pequeña, espero que llegue el final de Diciembre para poder contarnos  todo, absolutamente todo. Ni siquiera sé que demonios me espera en las próximas semanas de colegio. 
Buenas noches, Sarita, en donde sea que estés. 
Te quiero, entrañablemente, inmensamente. 


Con amor, 
Req. 

De Pie

¿Quién te dijo que podías partir, 
dejando la puerta abierta
soltando pétalos cual ceremonia 

dejando la herida y la sangre despierta? 

¿Quién te dijo que podías correr, 
con los besos que buscaste y se te negaron 
pidiendo perdones absurdos 
de los placeres que a los míos, reemplazar trataron? 

¿Quién te dijo que podías volar, 
como el gorrión traidor de la Muerte 
dejando las plumas de un olvido sangrante 
dejando el amor en en la ruina, inerte? 

¿Quién te dijo que podías golpear, 
como la parca y las noches maldecidas?
¿Quién te dijo, pobre desdichado, 
que podías llevarte mi vida? 

sábado, 12 de noviembre de 2011

Dosis Rojas

ASÍ TE DESTRUYO LA INFANCIA
Anoche me enteré de  cosas muy interesantes. Después de haber escuchado pacientemente ciertas realidades, no pude hacer menos que sentirme humillada, ofendida y usada. Di las buenas noches a todos, me acosté tranquilamente en la cama y antes de poder si quiera dar el primer respiro, golpeé furiosa mis almohadas y lancé toda clase de improperios con el rostro pegado al colchón, ahogando toda la racha de gritos y golpes que vino después. 
Del grito intenté llorar a ver si podía desahogar más rápido toda mi cólera, pero no funcionó. No pude llorar, así de siempre y comencé a dar vueltas en la cama, hablando con el techo e intentando dormir aunque no pude lograrlo hasta unas horas después, cuando a la una de la mañana, escuchando un soundtrack de Kill Bill, comencé a adormecerme. 
Hasta ese momento, estaba hecha el peor de los infiernos. 
Hoy en la mañana, en mis clases de francés, Zaida me escribió SUPÉRALO en el antebrazo con un plumón verde. Mi mamá se sorprendió al notarlo en el autobús, pero no hizo preguntas. Después de enterarse de toda mi trágica y ahora estúpida historia, prefiere no sacar el tema a flote, cree que ya no es necesario hablar de cojudeces una vez que pasaron y fueron superadas. ¿Fueron superadas? Les puedo asegurar que sí. 
Jamás he aceptado ni aceptaré que nadie me tenga lástima. 
A mi NADIE me tiene lástima ni pena, que les quede muy claro. 
Me voy a leer a mi cuarto. Aún no se me pasa la rabia del todo, pero voy, voy, voy por ahí. 


Con amor, 
Req. 


viernes, 11 de noviembre de 2011

Fin

No tengo porqué.
No, así de simple ¿Saben qué?
Se acabó.
No tengo porqué, simplemente porqué sentirme mal.
¿Saben porqué?
No puedo creer que me tenga tanta lástima.
¿Es en serio?

¿Sabes qué? No puedo creer que me haya tragado todas esas cosas, en serio, me has hecho ver la mujer más tonta y humillada del mundo. Hasta acá llegaron estas cojudeces. No necesito que me tengas lástima.
¿Y sabes qué más?
ME LLEGAS.






VETE A LA MIERDA.

Óleos

Eres 
mi libro sin dedicación 
mi violín sin cuerda 
mi lucha sin sangre 
mi llanto sin lágrimas 
mi noche sin estrellas
mi amanecer sin luz 

Eres 
lo que busqué y no encontré 
lo que corté y no sangré 
lo que miré y no observé 
lo que calculé y no resolví
lo que rayé y no ensucié
lo que apuñalé y no maté 

Eres 
la luna que perdió lo blanco
el sol que perdió lo amarillo 
la noche que perdió lo negro 
la sangre que perdió lo rojo 
el mar que perdió lo azul 
el invierno que perdió lo gris 

Eres 
el odio que más amo 
y el amor que más odio 
la luz que me oscurece 
y la oscuridad que me alumbra 

Psicologías & Cansancios

Hace tres días que no entro a mi blog y he sentido como si fuera una semana. Supongo que no es solamente por la carencia de tiempo, si no por una serie de remolinos espirituales, emocionales y artísticos que han estado amenazando con destruir mi equilibrio. No estoy segura de cómo explicar todas las cosas que han estado sucediendo a menos que utilice términos complicados y estructuras difíciles de tiempo y espacio.
Ayer me compré seis libros, mañana espero comenzar a leer "Poesía Amorosa: Antología" de Irma E. No tengo la menor idea de porqué voy a leerlo sabiendo que podrá matarme de un solo verso cargado de pólvora y recuerdos. No me comprendo, no lo comprendo, últimamente no entiendo nada y supongo que a nadie le sorprende ¿Verdad?.
El miércoles comencé a ir a mis sesiones con la psicóloga. Me gustaría mucho narrar con gran detalle cómo fue todo, en serio que jamás me había sentido mejor (respecto a los psicólogos) y creo que todo esto va a funcionar. Le di la dirección de mi blog a la Dra., quizás me esté leyendo en estos momentos o lo haga más tarde, en unas semanas, en unos días, quién sabe. 
Mañana tengo clases de francés, escucho Nothing Left To Lose de The Pretty Reckless e intento terminar un yogurt con chocolate que parece no acabarse jamás. Debería de visitar a un doctor esta semana, estoy teniendo ciertos problemas como aumento de sueño y dolores en el estómago de vez en cuando, a veces náuseas. 
Les diría que son los síntomas del cólera y del amor, pero ya terminé de leer esa obra hace mucho tiempo y no tengo ganas de citar la melosidad y crudo realismo de aquella novela que me marcó la vida.Vamos, ya deben de saber la historia hasta aburrirse, pero no me culpen, llevo cicatrizando ya como dos semanas o más, no me acuerdo. Muchas cosas extrañas han estado pasando, pero no, no tienen que creer que tengo la mínima esperanza de 'arreglar' las cosas y recién ahora estoy sufriendo los efectos secundarios de haber 'reformado una amistad, solo una amistad', y haber 'perdonado' una serie de injurias a mi espíritu y orgullo.
Ya les narraré la historia para que lloren un rato. Hoy día fui al teatro del colegio con unos amigos y me divertí mucho, a pesar de cosas que se me cruzaron y debí de ignorar para no tener de ansiedad. Ustedes me entienden ¿Aló indirectas?
Cada día siento más cansancio. Me voy del colegio el 16 de Diciembre, ya no tengo cuaderno de Historia, ni de Cívica, ni de Matemática. Perdón, pero he tenido suficiente por 11 años de mi vida. Todos tenemos un límite. 
Yo no puedo más.


Con amor y cansancio,
Req. 

Escupitajo #42

Cito al noble Neruda en esta noche sin luna y llena de agujeros negros:






Para que nada nos separe
que nada nos una.

martes, 8 de noviembre de 2011

Agonías

Tengo violines, notas al aire, corcheas abiertas 
tengo órganos solitarios, tengo sangre coagulada
donde deberían de haber sentimientos 
donde debería de estar la vida

Tengo risa partida, llanto seco, heridas malditas 
tengo frío interno, tengo muertos secretos 
donde deberían de haber recuerdos 
donde debería de estar la vida

Tengo fotos quemadas, palabras al viento, frases antiguas
tengo nieve roja, tengo mucha tristeza 
donde deberían de haber caricias
donde debería de estar la vida 

Tengo oscuridad profunda, pecados largos, cosas raras 
tengo noches lejanas, tengo días abandonados 
donde deberían de haber domingos de gloria, 
donde debería de estar la vida

Tengo poemas inconclusos, rostros serios, labios rotos 
tengo soledades de tren, tengo playas infectadas
donde deberían de haber años maravillosos, 
donde debería de estar mi vida 

Nada De Nosotros


Ni tu amor
ni tu odio
ni tu muerte
ni tu vida
ni tu esposa
ni tu amante
ni tu hija
ni tu hermana
ni tu madre
ni tu beso
ni tu mordida
ni tu golpe
ni tu puñalada
ni tu llanto
ni tu risa
ni tu abrazo
ni tu abandono
ni tu verso
ni tu prosa
ni tu broma
ni tu frialdad
ni tu amargura
ni tu felicidad
ni tu recuerdo
ni tu olvido
nada es tuyo
nada es mío


Telarañas

"De qué me sirve mirar a la luna y pedir deseos si los deseos se quedan en sobres y nunca llegan a quien sea que los conceda. No tiene sentido que mire al cielo despejarse, que cierre los ojos apoyándome en las duras carpetas a recordar placeres pasados si las memorias no son más que mariposas que alejas con aleteos crueles de la realidad.
De qué me sirve decir que podría esperarte todos los años que me pidas, si son palabras que jamás atravesarán tu boca. No tiene sentido que me ponga a pensar en términos de tiempo, espacio y madurez, cuando hay una gran diferencia entre ser madura y experta en fingir.
De qué me sirve entristecerme por tu santa presencia y olvido si no voy a poder llorarte jamás y si lo consigo sería como el beso de la muerte. No tiene sentido que toque valses y violines en la soledad si la música no es más que algo invisible a quien amar cuando todo te decepciona.
De qué me sirve odiarte por las crueldades y humillaciones de tu joven corazón hacia mi maltrecha existencia si jamás tendré la fuerza para desearte el mal y la soledad. No tiene sentido que me escape de ti o te intente encontrar si observarte de lejos, pedazos y pinceladas de tu nuca lejana, es suficiente para darme la más rara de las tranquilidades.
De qué me sirve amarte por lo especial de tu vida, de tu persona, de lo que eres y siempre has sido si jamás me amarás y solo recordarás mi llanto lejano como un remordimiento cruel de consciencia. No tiene sentido que te sueñe, te añore y te extrañe si aunque regresares, siempre estarás lejos.
De qué me sirve decir "Solo Dios sabe cuánto te quise" si la frase es de García Marquez y el libro en la que se encuentra es sol una novela que jamás se aplicará a nuestra realidad tan frívola. No tiene sentido que te dedique más poesía ajena si jamás sabrás los versos infinitos que me causaron tus curas y heridas.
De qué me sirve emocionarme por tu presencia y encuentro casual si dará exactamente igual en unos meses y te olvidarás con qué letra inicia mi nombre. No tiene sentido que me palpite el corazón si no sentimos nada.
De qué me sirve pedirle a Dios que te cuide el resto de tu vida si no quieres aceptar mi alergia a despreciarte. No tiene sentido que desee tanto tu bienestar, si tú no me creerás nada jamás"

lunes, 7 de noviembre de 2011

Cicatrices II

Fecha de creación: Noviembre 03
Nota: Este poema fue escrito en otro momento en donde estaba triste.




Tú, que me arrancaste de raíz el Octubre
que dejaste en ceniza mi Noviembre
y amenazas con silencios mi Diciembre

Tú, que me obsequiaste la demencia absoluta
que despertaste el demonio de la frialdad
y sembraste en mi la hiedra de llanto

Tú ,que me sangraste la risa de los domingos
que desgarraste la poca alma que me quedaba
y bendeciste la tristeza que a mi corazón consumía

Tú, que rompiste los relojes de mi juventud rara
que inspiraste la soledad y lo maldito
y te mantienes en el recuerdo
como la peor de las historias

Cicatrices I

Fecha de creación: Noviembre 03
Nota: Este poema fue escrito en otro momento en donde estaba triste.





Y aunque volaras cien años
buscando los rastros de mi alegría
no hallarás piedad ni memoria
solo mi alma destrozada


Y aunque de rodillas tejieras
las redes venenosas de una risa
jamás me volverás a encontrar
solo la sombra en la que me he vuelto


Y aunque regresaras aterrado
a los escalones de un beso mortífero
nunca los sentirás de nuevo
solo la rosa marchita de mi pasión

Hate Mondays, Love Nothing

He perdido mi cuaderno. ¿De matemáticas? ¿De Historia? No, por el amor de Dios, he perdido mi cuaderno de desahogo escolar. Debe de estar en mi casa, en algún rincón de mi habitación. La última vez que lo vi era porque iba a colgar unos poemas de mujer pisasa y triste en mi blog ; veo que el extravío es el precio del dolor contenido (?).
Espero a que suene el timbre en mi clase de _________. Hoy día me he propuesto enfrentar a un antiguo recuerdo con la casualidad que solo tienen los más fríos pasadizos.
Mi violín me hace compañía, no tengo muchas ganas de hablar, pero sí de reír y en lo posible, de leer todo el día.
No sé porqué me sigo quedando al comedor del colegio. Cada semana como menos.
Y no, no es anorexia, porque mi figura me da exactamente igual y los sábados sigo disfrutando de un desayuno de papas fritas y mixtos con Sprite helada en la Alianza Francesa.
No tengo más que decir, salvo que sigo extrañando a Sarah y espero pacientemente a que lleguemos a Diciembre para verla de nuevo y despedirme de muchos personajes, cof, que no veré nunca más (¿Segura?).
Aunque voy a extrañar a Loli, a la orquesta, a todos mis amigos músicos y a la biblioteca, que si bien es acogedora, también guarda entre sus estantes muy malos recuerdos.
Estoy apática en los estudios. Es mi último bimestre, estoy enferma de tantas cosas.
Buenos días.



Con amor (?),
Req.


PD: Mis tendencias alcohólicas van de mal en peor. Necesito ayuda profesional. ¿Alguien se ofrece a ir al teatro conmigo? Es todo lo que necesito. Un poco de arte y tranquilidad.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Escupitajo #42

Nunca
pero nunca
tomen vodka con sprite tan temprano
con el estómago vacíoofsdfd
porque se sienten aburridos
deprimidos fd
suicidass
carentes de motivación
y de tareas

Jamás ¿Comprenden?
Estoiy ahceidno un esfuerzo extremo por escribir sin errores
tengo medicamentos que tomar y tengo miedo
que un chorro de vodka
me lleve a la muerte
deséenle meifolemrjor
loe mejor am i
estado mental
esto nunca suele pasar.




Con amor, 
Req. 

sábado, 5 de noviembre de 2011

Cartas a Sarah V

Querida Sarah:


Los mensajes de texto que nos enviamos desde hace unos minutos me han sido infinitamente reconfortantes. Se  acerca la medianoche, mañana será domingo y yo escucho a Ibrahim Ferrer cantar una serie de boleros y composiciones tristemente lentas que quizás nunca te enseñé. ¿Alguna vez te compartí mis discos de aires cubanos y antiguos? Creo que no, pero siempre he creído que han sido la mejor manera de acompañar una muerte o una tristeza, además de los Nocturnos de Chopin. 
No debo de repetirte lo mucho que te extraño porque estoy segura que lo sabes de antemano. Han sido tiempos tormentosos, agradables, monstruosos y bellos, todo ha sido como una montaña rusa y temo que necesito contarte la historia de inicio a fin, pero estás lejos y yo también.
Foto tomada hoy día. Sé te hubiera gustado.
Mi vida ¿Qué ha pasado con mi vida? Pues ha sido afectada de todas las maneras posibles. Te puedes imaginar. Ingresé a dos universidades pero decidí quedarme en la PUCP, sigo leyendo mis novelas todo el tiempo aunque últimamente he sentido cierto tedio ante la lectura y creo que es por falta de un libro verdaderamente bueno. Lo último que terminé fue "El amor en los tiempos del cólera" y el día que terminé de leerlo, fue el día que terminé con Ludovico, cuyo nombre original es Enrique. 
Te hubiera caído muy bien y después lo habrías odiado con el mismo desprecio que sentías por la persona de la cual me enamoré en esos años cuando estudiábamos juntas. En fin. Te habría gustado su gusto musical, su poesía perfecta, su personalidad como un misterio y apuesto a que mi alma hubiera sanado más rápido si hubieras estado aquí ese jueves fatídico que me rompió el corazón con la más dulce de las crueldades.
Debería de contarte la historia con morbo de detalles, pero no es el momento ni el lugar indicado. Esperaré hasta que nos veamos en Diciembre. Si te preguntas cómo estoy, debo de decirte que no estoy muriendo, no de la manera en que lo piensas, porque desde la segunda noche que estuve con él, supe que tendríamos un final y a veces en la ducha (siempre las filosofías en las duchas) me imaginaba las maneras en cómo él daría muerte a nuestro amor, si es que hubo uno, si es que, Sarah mía, alguna vez aprendimos qué es el amor. 
Tú y yo deberíamos de hacer un libro algún día. Si no podemos darnos el placer de eso, por lo menos rezo por unos cafés, un almuerzo en Diciembre, aunque sea una hora para hablar de todo, absolutamente todo lo que no nos hemos podido decir en casi un año (¿O más, Sarah mía?) de ausencias.
Las cosas van mejor en la familia. Nunca perfectas, pero van mejor. Mi mente sigue siendo el mismo revoltijo de cables y pensamientos que la última vez que nos vimos, no te preocupes, no he cambiado para mal, sigo estando demente y espero, en el sentido más amigable posible, que sigamos compartiendo la misma demencia.
Espero que allá en donde estés, te encuentres bien, te recuerdo todo el tiempo y extraño nuestras salidas, conversaciones profundas e historias interminables.


Con infinito amor, 
Requiem. 


PD: Le di un collar de sol a Ludovico que se unía con el de una luna (que yo tengo) y formaba una sola imagen. Estoy considerando la posibilidad pedírselo de vuelta y dártelo. Siempre quise dárselo a alguien que podría lidiar con tiempos y promesas. Supongo que siempre ha sido tuyo. 



Escupitajo #41



Hoy voy a encerrarme en mi cuarto a leer.
No quiero que nadie me moleste.
Ni me hable.
Ni me observe.
Ni me pida tocar algo en el piano.
Simplemente váyanse todos lejos de aquí. 
Déjenme sola. 

viernes, 4 de noviembre de 2011

Cánceres

Creer que las cosas saldrán bien. Es así, algo como cogerse de racimos de esperanzas que solo se harán agua en mis manos, como uvas viejas. Decirle a mi amigo que cuando hable en italiano cuide sus palabras y no cite películas clásicas, esquivar los autobuses de colores tropicales con números primos e impares y que recorren los caminos en donde alguna vez, se escribieron las mejores historias. 
Girarme cuando nadie, absolutamente nadie está observando para contemplar en silencio siluetas y personajes que alguna vez quise con tanta ceguera, con tanto sentimiento. ¿Por qué? Me prohíbo del cine clásico italiano, me prohíbo las Suites para cello de Bach y sin embargo las toco en el violín como si me burlara de mi propia  desdicha. 
Porqué oculto poemas entre mis libros y me alejo, como si temiera a que se levantasen por la noche a molestar. No comprendo. Sigo confundida después de tanto ¿Tanto? tiempo. 
Porqué me río sola como si hubiera si quiera una cosa  graciosa. Y voy y bailo por los pasadizos con Loli, me río de todo, me río de mi, de la situación, del aire frío de la ciudad y me río con los enfermeros, con las personas que conozco, me río de todo y en realidad no hay ni un solo motivo que me cause la más mínima felicidad. 
Me he olvidado de los procedimientos para llorar y hoy una pieza de violín me hizo recordar que soy humana y en consecuencia, tendré que llorar de nuevo en algún momento. Cada vez duermo menos en la noche, siento más cansancio en el día, como menos, bebo más, tengo sed todo el tiempo y siento el corazón seco, como un arbusto del desierto, como muchas cosas muertas. 
Camino por los pasadizos y creo que mirando de frente y acelerando el paso todo estará bien. Qué clase de persona monstruosa soy, el porqué no puedo enfrentar mis miedos es indefinido. Quisiera dejar de apresurarme, dejar de ocultar mi rostro, dejar de pensar y sentir un agujero en el pecho tan grande que todas las miserias del mundo podrían entrar y hallar el abrigo que necesitan. 
No siento amor ni siento odio, no siento cariño ni tampoco desprecio, no siento nada, estoy muriendo con cada minuto que pasa, lento, extraño. 
Tengo tantas ganas de decir algo, quisiera tanto solucionar lo que parece un nudo eterno, quisiera saber qué tengo que hacer para abandonar este vacío  tan silencioso, tan paranoico, preocupante, humillante. 
La peor desdicha de mi vida, se basa en que quizás, yo sé la respuesta. 

Escupitajo #40

Desde temprano en el colegio he sentido una sensación de ahogo en la garganta que no tiene explicación. Tengo ganas de fumar mucho, pero nunca lo he hecho realmente. Hoy día me serví un vaso de Sprite y le eché un chorro de Vodka creyendo que me haría sentir mejor. No sé si funcionó, tampoco es importante.
Tengo frío, pero sé que estoy abrigada, tengo ganas de leer, pero mi libro descansa en la cama. Miré 'Ángeles y Demonios' en DVD para ver si podía distraerme un poco y funcionó, pero no es suficiente. 
Estoy tomando pastillas todos los días.
Mi sistema nervioso está por colapsar, puedo presentirlo, puedo oler mi fin.
O por lo menos el fin de mi sanidad. 
Puedo sentir mis ánimos cambiando colosamente, puedo sentir tanta tristeza como pena, puedo tener miedos y valentías, profundos odios como los amores más hondos. 
O quizás es porque soy actriz, histriónica y nunca he sentido nada jamás.
Cómo saber si alguna vez fui humana,si esto lo que hago porque lo siento y no porque la vida es una escenario y yo he perdido el control.
He perdido el control absoluto de mi. 
Ya no sé qué es lo que sigue.


jueves, 3 de noviembre de 2011

Palabras De Un Camarada

De: Memo Salvatierra.
Para: Barbara Ramos

Dedicado a ti,compañera.

"Otros se aprovecharan de nuestros miedos llenándose los bolsillos con ello, pensar que solo quieres ser especial en un mundo que solo condena a la nada, saber que buscas el espejismo de lo que crees que te hara feliz, buscas la perfección en el sitio equivocado, la perfeccion es aceptar lo que tenemos y disfrutarlo, la perfeccion es no arrepentirse jamas de lo que hacemos, aceptar nuestro apoyo, por que en el otro lado solo hay un valle de lagrimas, dolores, esperanzas y objetivos que jamas verán la luz." 


Mis Verdaderos Sentimientos

Tengo dos poemas de amores tristes en mi cuaderno que utilizo para plasmar mis pensamientos en el colegio. Debería de haber venido de frente a publicarlos, ponerles una imagen emocional y hacer que todos ustedes me tengan pena y digan "Oh, ya pasará, pobre chica, no te preocupes, él no lo valía". Pero esta noche me siento diferente. 
Hoy día llegué a la conclusión que he llevado meses deprimida y solamente ahora se han mostrado las señales de esta. Pero esta entrada no es sobre mis desórdenes mentales, tampoco para contarles las tragedias de mi vida sentimental ni contarles un cuento lleno de muerte o un poema lleno de rima.
Esta noche he venido a escribir sobre algo que debí de ver hace mucho tiempo. Vivo en el Perú, aquí nací, tengo 17 años, este año termino el colegio y el próximo iré a la universidad, yo creo en la libertad, creo en el arte, en las emociones, en la eternidad, en Dios. Creo en el amor, creo en la tristeza, en la psicología, en la poesía, creo en el poder de las ideologías, creo que el mundo en general se está yendo al carajo y también creo que todo, absolutamente todo, tiene una solución.
Creo en mis amigos, en mis enemigos, en las personas que ya no me hablan y en los que aprendieron a perdonar, así como los que yo perdoné. Creo en muchas cosas, pero esa noche me he dado cuenta que he comenzado a creer en mí. 
Tengo un país tercermundista el cual tiene que salir de este agujero de pobreza, tengo un género el cual debe de luchar por la libertad, por arrojar las cadenas de una sociedad machista, tengo hermanos y hermanas de diferentes razas que merecen igualdad, que tienen la cabeza llena de ideas y no son escuchados, tengo ideas y pensamientos dentro de mi que han sido opacados por mucho tiempo.
Estoy harta. Harta que las personas de mi edad, y me incluyo porque me ha pasado, estemos tan preocupadas en lo emocional. Estoy harta que todos estemos enamorados o rencorosos con personas y que el desprecio o el amor que merecen nos ocupe tanto espacio en la vida. Tengo tantas cosas importantes en qué pensar, tengo un país que sacar adelante, ideas que compartir con los demás, tengo música, tengo arte, libros, tengo la lucha en la sangre y millones de personas que solo necesitan una palabra para salir de su esclavitud.
Tengo un corazón, tengo una mente, tengo un espíritu, una vida por delante. 
Esta noche siento que por fin comienzo a diferenciar las cosas importantes, comienzo a ver una luz y a sentir un calor que hace tiempo no podía percibir. Tengo una revolución en la cual participar. Tengo, tenemos, muchas cosas que hacer. 
Tenía que escribirlo. Debería de haber venido a contar mis historias de triste adolescente, pero no, esta noche no. Esta noche les digo lo que pienso, lo que siento y lo que planeo.
Esta noche soy más honesta que nunca. 


Mis mejores deseos, 
Requiem.

Frases Paternales I


Conversación con mi papá, hace unos minutos. 


‎-Papá, he llegado a la conclusión que tengo un país por el cual luchar, tengo ideales, tengo conocimientos, tengo una vida por delante y debería de darle importancia a eso y no gastar mis emociones en otras cosas 
 -Me alegro, hija, por fin.  
 -¿Por fin qué?  
 -En los últimos días has estado sufriendo por cojudeces. Sea lo que haya sido, no merece ni una puta lágrima tuya.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Escupitajo #39







-¿Lo odias?
-No.
-¿Lo amas?
-Tampoco.
-¿Volverías con él si te lo pidiera?
-Sí.
-Barbara, eres una estúpida.
-Lo sé.
-Jamás te lo he dicho ni pensaba decírtelo, pero no me queda de otra. Eres una estúpida.
-Totalmente. No puedo hacer nada al respecto. 

17 Años De Mi

Cumpleaños feliz,
te deseamos a ti

Feliz cumpleaños,  Barbarita 
feliz cumpleaños a ti









¡Yay! Hoy día cumplo 17 enormes, gordos, estresantes y hermosos años de mi vida. ¿Pueden creerlo? Yo no. Lo más raro del asunto es que hubo un momento en el día en el que le pregunté a un amigo la fecha y me miró con su cara de ¿Es en serio? Bueno, siempre he sido despistada, pero nunca pensé olvidarme momentáneamente de mi natalicio.
Maldición, tengo 17, me siento grande, feliz, joven y vieja al mismo tiempo. ¿Pueden ver que estoy feliz? ¡Perfectísimo!
Hoy día muchos me saludaron en el colegio y alegraron mi día con sus abrazos.
Ah, ha sido un día muy tranquilo.
Soleado.
Como no los sentía hace tiempo.




Con amor y 17 años encima, 
Requiem. 

martes, 1 de noviembre de 2011

Mi Cumpleaños: Antes De

Mañana es mi cumpleaños. Oh sí, mañana es mi cumpleaños y ya varias personas me han saludado, familiares, amigos de la familia, mi ex (el primero, jaja sí ríanse porque dije 'el primero' jaja, ríanse) y bueno, mañana será un gran día, espero, de verdad lo espero. 
Está bien, ya hice evidente que me siento triste.
Es muy estúpido de mi parte ponerme en estos ánimos. 
No, claro que no, no es por nada en especial, nada que ver, ustedes se pueden imaginar, mi vida que es tan bonita, feliz, contenta, romántica y perfecta. 
Mierda.
Está bien, no estoy triste, me siento humillada eso es todo. ¿Por qué? ¿Quieren saber porqué? Olvídenlo, no voy a escribir porqué  tengo el orgullo herido, porqué me siento tan humillada como si hubieran trapeado el suelo con mi dignidad y luego me la hubieran colgado del cuello como un collar. 
Soñé que Ludovico regresaba con su ex de hace años noches atrás. 
¿Y saben qué?
No me sorprendería. 
No le guardo resentimientos ni rencores estúpidos a nadie, solo dije que no me sorprendería que le importara un comino mi casi-muerte, resurrección y actual rehabilitación mental, espiritual, lo que sea, no me importa, olvídenlo.
Mañana es mi cumpleaños, mañana, 2 de Noviembre, cumplo 17 años. 
¿Es que tengo que ser tan tonta todo el tiempo? 
Refugiarme en el alcohol, la risa, los violines, la poesía y el Internet como la cobarde que soy. 
No podré hablarle de nuevo jamás. 
Y sin embargo, siento que si me lo pide, podría hasta contarle mi vida de nuevo. 

Tareas & Mensajes

Para lenguaje en el colegio nos pidieron hacer una tarjeta dedicándole un libro a alguien. Hoy día  terminé y no tienen que preguntarme exactamente cómo lo hice ni en quién fue pensando porque sería absurdo y redundante. 
Dejen de creer que estoy triste, no estoy triste. 
Solo humillada. 




"Te recomiendo 'El amor en los tiempos del cólera' aunque no te parezcas en absolutamente nada al personaje y lo más probable es que ni siquiera creas en las cosas que dice. Sé que te gustará, a pesar de todo, porque es una novela que combina la fantasía y los sueños más profundos con la realidad y tú siempre has divagado sobre las mentiras y lo que es real. Espero que este libro, más que ayudarte acreer, te de una pequeña esperanza para que aprendas lo que es luchar por algo y jamás arrepentirse de las cosas que uno buscó alguna vez con tanta pasión.
Este libro es curioso, porque parece que hablaba en clave todo el tiempo.
Algo como lo que tú haces desde que te conocí" 


Con amor, 
Barbara. 

Despechos

Si tu viera que llorar,
por cada segundo de pecaminoso placer
que cruzó los parajes oscuros de mi vida
me despediría de mis ojos
y me detendría a esperar a la triste ceguera

Si tuviera que extrañar,
a los crueles e ingratos amados
que me obsequiaron tiempos de risa y éxtasis
me ahogaría en la pena más grande
 y me alejaría de la vida, la paz

Si tuviera que callar,
por cada orgasmo dormido y sonrisa real
que iluminaron el triste recorrido de mi juventud
me detendría a morir en la espera silente
y me arrancaría la risa,
me arrancaría el amor